LA CAÍDA  de  los

ESTADOS UNIDOS

Capítulo 1
¿EL MUNDO SE ESTÁ VOLVIENDO LOCO?

¿HA TENIDO USTED ALGUNA VEZ la sensación de que el mundo se está volviendo loco? Las personas ya no pueden convivir unas con otras. Las grandes empresas tratan de ganar dinero a costa de otros. Las naciones están cada vez más cerca de una guerra. El mundo es cada vez más caótico y la paz parece algo muy lejano. El esfuerzo conjunto para intentar solucionar los conflictos es algo que prácticamente ha desaparecido.

La palabra drama ha adquirido un nuevo significado. Los conflictos surgen en la vida de las personas y las tensiones, el estrés, las frustraciones, la miseria y la infelicidad aumentan rápidamente. El drama se está convirtiendo en una forma de vida. Algo que causa desacuerdos. Las conversaciones entre las personas se resumen en la necesidad de “compartir” su propia miseria e insatisfacción en la vida con los demás.

Y ese efecto tan negativo en la vida de los seres humanos es en gran parte el resultado de una dependencia cada vez mayor de la tecnología. Hoy en día la información y las ideas de las personas pueden ser amplia y muy rápidamente difundidas. Esto se extiende cada vez más y es algo que ya está fuera de control. Esto a su vez ha permitido una escalada del drama, que se abre paso más fácilmente en la vida de las personas. Y para muchos el resultado de todo esto es tan abrumador que ellos no pueden hacer frente al impacto que esto tiene en su vida diaria.

Pocos parecen comprender que estas cosas están cambiando la sociedad, están quitando la paz y la tranquilidad de nuestras vidas. Estos rápidos cambios que tienen lugar en la sociedad son el resultado directo de la incapacidad de los seres humanos de adaptarse al desarrollo tan rápido de la tecnología. Además, como toda esta tecnología es nueva, no tenemos ningún precedente para saber cómo utilizarla correctamente. Y en el desarrollo de la tecnología poco se tiene en cuenta nuestra salud y nuestro bienestar. Esto, a su vez, está teniendo un impacto muy negativo en la vida humana. Un impacto cuyo peligro no se puede ver fácilmente.

¿Esclavos de la tecnología?

Durante miles de años, los seres humanos han ido desarrollado poco a poco su comprensión de la ciencia, del proprio mundo y de la vida que hay en él. Pero ha sido solo en los últimos 150 años que un rápido y efectivo desarrollo en el conocimiento de las matemáticas, de la ingeniería, de la física, de la astronomía y de la química ha comenzado a consolidarse. Y esto ha tenido un gran impacto en la vida de las personas.

En los últimos 70 años especialmente, la tecnología ha estado desarrollándose constantemente. Y esto tiene un impacto cada vez mayor en nuestra forma de vivir. La tecnología tiene un impacto muy positivo en la calidad de vida de los seres humanos. Pero junto con esto también está el mal uso de esa tecnología, algo que está teniendo un impacto muy negativo en la sociedad.

La rapidez con la que se producen estos cambios es cada vez mayor. Esos cambios tienen lugar tan rápido que la sociedad no puede seguir el ritmo. Y, como resultado de esto, las personas no son capaces de lidiar adecuadamente con el impacto negativo de la tecnología en su vida.

Simplemente pare y piense en la cantidad de personas que se están convirtiendo en esclavas de la tecnología hoy en día. El uso, y a menudo el mal uso, de los teléfonos móviles es un perfecto ejemplo de esto. Internet y todas las aplicaciones que existen brindan un sinfín de maneras de controlar todos los aspectos de nuestra vida. La “necesidad” de estar constantemente conectados se está volviendo algo muy adictivo. Esto no debería sorprendernos, ya que los desarrolladores de software manipulan constantemente el comportamiento de las personas para mantenernos pegados a sus productos durante el mayor tiempo posible, ya que así ellos ganan más dinero.

Los usuarios adictos pueden ser fácilmente detectados ya que ellos suelen caminar por las calles como zombis, incapaces de apartar la mirada de sus teléfonos. Algunos cruzan la calle sin ni siquiera mirar si viene algún coche o camión en su dirección. Otros se quedan mirando al teléfono detrás del volante de sus coches y no arrancan cuando el semáforo se pone en verde porque su necesidad de mirar constantemente a su teléfono es muy fuerte. Y, desgraciadamente, familias enteras también se han vuelto adictas a la tecnología. Esto es algo que se puede ver fácilmente en casi cualquier restaurante. Familias enteras sentadas en completo silencio, cada uno profundamente inmerso en su propio agujero en el ciberespacio.

Y a través de Facebook, WhatsApp, Twitter, Instagram, TikTok, Reddit y muchos otros medios en las redes sociales, el drama es compartido a niveles nunca experimentados, ni remotamente, en épocas pasadas. Las personas se están volviendo prisioneras de estas seductoras creaciones de la tecnología moderna. Y, como resultado del hecho de que las personas comparten cada vez menos unas con otras sus experiencias en un contacto directo y en vivo, la mente humana necesita de un flujo constante de información y depende cada vez más de esto. Y esto está privando las personas de experiencias gratificantes en la vida y de la posibilidad de tener una vida social mucho más significativa y placentera.

Compartir la vida a través de la tecnología no es lo mismo que experimentar y aprender cómo vivir compartiendo con otros a través de relaciones en persona, del contacto directo. Hay una gran diferencia entre una cosa y otra. Los que desarrollan una dependencia de esos medios están cada vez más insatisfechos con su vida. Esperemos que la pandemia del coronavirus haya ayudado a más personas a valorar esa diferencia.

Esta dependencia puede fácilmente hacer con que las personas se vuelvan menos sensibles y dejen de preocuparse por los demás. Esto puede insensibilizar sus sentimientos y hacer con que ellas desarrollen una actitud insolente y desconsiderada hacia los demás. El hecho de que las personas se centren cada vez más en sí mismas fomente el egoísmo y produce más drama en la vida. Y el camino hacia la tranquilidad y la paz se vuelve cada vez más oscuro.

Y queda claro que esas cosas escapan a la atención y a la comprensión de los adictos a la tecnología. La mayoría de ellos ni siquiera se da cuenta del alcance de su adicción. El resultado de esto es un mundo en el que no solo los individuos, pero también la sociedad, las organizaciones e incluso las naciones se están volviendo cada vez más individualistas. Esto provoca un gran aumento de las divergencias, los conflictos, los desacuerdos y el malestar social entre las personas.

El resultado de todo esto es el drama, a un nivel que el mundo nunca había experimentado antes. ¡Ni remotamente! Y esto es algo con que el mundo no es capaz de lidiar. Esto está fuera de control. ¡El mundo se está volviendo loco!

Hoy en día, conceptos como compromiso mutuo, hacer concesiones, buscar un término medio, dar y recibir o encontrar una manera pacífica de solucionar los conflictos suenan extraños para las personas. Es como si estos conceptos fuesen un arte olvidado. Sin embargo, es a través de esas prácticas que las personas pueden acercarse más unas a otras y resolver sus diferencias; algo que puede producir resultados gratificantes en la vida.

Cosechando lo que hemos sembrado

Como si la vida ya no fuera lo suficientemente confusa, ahora tenemos que familiarizarnos con términos como “woke” [Ese término describe a personas que están al tanto de las problemáticas sociales de hoy en día, incluso si no le afectan directamente. Sin embargo, ahora muchos lo emplean de forma más bien peyorativa para designar a alguien que se siente moralmente superior al resto], “cultura de la cancelación” y “apropiación cultural” para no ofender a otros que tal vez se sientan rechazados o piensen que están siendo atacados. Estamos siendo cada vez más presionados para que encajemos en un determinado molde en lo que se refiere a cómo nos comportamos y de qué podemos o no hablar.

Un entorno que presiona a las personas para que estén de acuerdo o en desacuerdo con él es algo que suele ensanchar la brecha, algo que solo enajena y divide aún más a la sociedad. Tener una conversación pacífica y tranquila con otras personas que tienen ideas u opiniones diferentes es algo que se está volviendo cada vez más raro.

En cambio, la sociedad y las naciones se están volviendo cada vez más individualistas y más egoístas. Hay demasiadas personas que quieren hacer las cosas a su manera y que están dispuestas a calumniar, ultrajar, ridiculizar, burlarse, discutir, pelear, vociferar y atacar a todo y a todos que se interpongan en su camino. No les interesa para nada lo que otros puedan querer. Ellos simplemente lo descartan o ni siquiera lo consideran.

Desde que comenzó la pandemia del coronavirus una espiral descendente ha acelerado este proceso, que solo está causando división y descontento en todas las naciones. Esto también ha generado una dependencia aún mayor de las redes sociales. La mala noticia - muy mala noticia - es que esto va a empeorar mucho más antes de que pueda empezar a cambiar.

Solo en el último año se ha producido un drástico cambio que ha alejado a los seres humanos aún más de cualquier cosa que se pueda llamar paz. En lugar de esto vemos un gran aumento de la insatisfacción, de los conflictos, de la división, del caos, de la anarquía, de los crímenes, de los suicidios, de los asesinatos, de la adicción a las drogas, del abuso del poder, de la opresión, etc. ¡Sí, el mundo está cada vez más loco!

Este rápido cambio, que aleja el mundo de la paz, es un cambio que está llevando a muchos en la dirección del extremismo. Tanto en su manera de pensar como en sus acciones. Se necesita moderación para hacer con que lados opuestos se sienten a negociar de una manera más efectiva para resolver sus diferencias. Pero lo que vemos en las noticias hoy en día es solo los extremos de ambos lados, porque esto es lo que lleva a las personas a responder con base en sus emociones. Esto, a su vez, lleva a las personas a dejarse controlar por sus emociones y ellas entonces tienden a ir hacia la extrema derecha, la extrema izquierda o cualquier posición extrema que una persona puede adoptar.

Los algoritmos utilizados por las redes sociales empujan a las personas aun más hacia los extremos al conectar a personas con puntos de vista parecidos y excluir a los que tienen puntos de vista diferentes. Cuando las personas solo escuchan un lado de la cuestión esto les impide ver donde está el equilibrio entre los diferentes puntos de vista e ideas. Esto suele polarizar la sociedad y fomentar el extremismo a ambos lados.

Y, como resultado de esto, más personas están siendo llevadas, aunque sin saberlo, a elegir bando. Y cuando esto sucede la inclinación natural de las personas es no moverse de su posición, es no retroceder. Y esto es exactamente lo que está sucediendo, también a escala internacional entre las naciones. Esto está creando un clima de confrontación entre las naciones, llevándolas a hacer sonar cada vez más fuerte los tambores de guerra.

No podemos cerrar los ojos y esperar a que todo esto cambie o simplemente desaparezca. Debemos entender que hay una causa para todo lo que está sucediendo y que esto está afectando a todos. Nadie puede esconderse de esto; aunque algunos lo intenten. El mundo está comenzando a cosechar lo que ha sembrado en las últimas décadas.

Debido al creciente uso indebido de la tecnología, que está en constante desarrollo, estamos presenciando un peligroso cambio en la sociedad; un cambio que está llevando al mundo a una aterradora guerra.

¡Avisados durante más de 70 años!

Lo que el mundo está presenciando y experimentando ahora nos está llevando a pasos rápidos en la dirección de la profetizada tercera guerra mundial. Muy pocos en el mundo hoy prestan realmente atención a las noticias, a los acontecimientos que están teniendo lugar. Cosas que influyen en las predisposiciones, en la manera de pensar de las personas, en el comercio mundial, en la economía y en las relaciones internacionales. Las personas tampoco se dan cuenta de que todo esto nos está llevando hacia una guerra mundial.

Durante más de 70 años ahora las personas han estado siendo avisadas sobre acontecimientos muy específicos que sucederían en el tiempo del fin y que llevarían al mundo a una tercera guerra mundial. Muchos de estos avisos se refieren a importantes acontecimientos que iban a tener lugar en Europa y que han sucedido exactamente como un hombre predijo.

Vamos a considerar lo que ese hombre empezó a decir a principios de 1950 sobre esta guerra que se avecinaba. Luego después de la Segunda Guerra Mundial ese hombre predijo con exactitud cuatro importantes acontecimientos que tendrían lugar en Europa Occidental y que nos llevarían a la Tercera Guerra Mundial. Tres de esos acontecimientos ya se han cumplido y sobre el último se ha informado recientemente en las noticias en Europa.

Él dijo que Alemania se levantaría nuevamente como potencia mundial y que estaría a la cabeza de las naciones que se unirían en lo que hoy es la Unión Europea. En aquel entonces esto pareció algo ridículo y totalmente disparatado para muchos de los que lo escucharon. Especialmente considerando la destruición que las fuerzas aliadas acababan de hacer en Alemania.

Sin embargo, este hombre explicó que (1) Europa, con Alemania a la cabeza, se levantaría nuevamente en una unión de naciones con (2) un gobierno común, (3) una moneda común y (4) que al final exactamente 10 naciones europeas formarían una alianza con un ejército común.

Piense en lo absurdo que debió parecer a muchos en ese entonces que justo después de la Segunda Guerra Mundial un hombre dijera que Alemania, una nación que había quedado reducida a escombros, iba a levantarse nuevamente y que iba a estar a la cabeza de una Europa unida. Esto les pareció algo tan absurdo que este individuo fue ampliamente ridiculizado y rechazado por la mayoría de los que escucharon estas predicciones.

¿Cómo tomar en serio a alguien que decía tales cosas luego después de una guerra tan horrible entre los Aliados y las potencias del Eje formado por Alemania, Italia y Japón? Una guerra en la que millones de personas habían perdido la vida.

Sin embargo, en marzo de 1957, siete años después de que él predijera estas cosas, Francia, Alemania Occidental, Italia, los Países Bajos, Bélgica y Luxemburgo firmaron el Tratado de Roma, fundando así la Comunidad Económica Europea (CEE), institución también conocida como Mercado Común Europeo, el predecesor de la Unión Europea de hoy.

Este hombre afirmó que estos avisos eran profecías sobre el tiempo del fin que Dios le había revelado. Y la pregunta es: ¿Cómo pudo ese hombre predecir cosas que en la época parecieron tan poco creíbles, pero que ahora han demostrado ser tan ciertas?

Aunque muchas personas se burlaron de él y ridiculizaron las cosas que él afirmó ser acontecimientos del tiempo del fin que llevarían a la Tercera Guerra Mundial, los acontecimientos que él predijo sucedieron tal y como él dijo que sucederían. Él vio el surgimiento de una estructura gubernamental común en Europa, en 1957, pero no fue hasta 1999, 13 años después de su muerte, que Europa introdujo el euro como su moneda común. La Unión Europea ha ido creciendo desde entonces hasta llegar a tener 28 estados miembros. 27 ahora, ya que Gran Bretaña ha decidido marcharse de la institución. Y hasta el momento, 19 de los 27 estados miembros de la Unión Europea han adoptado el euro como moneda oficial.

Y en 2018, 32 años después de la muerte de ese hombre, 10 naciones de la Unión Europea firmaron un acuerdo de cooperación militar, exactamente como él predijo.

Lo que voy a citar a continuación son fragmentos del artículo Emmanuel Macron presenta la coalición de defensa europea; artículo que ha sido publicado el 8 de noviembre de 2018 en la revista THE WEEK:

La formación de una alianza entre diez ejércitos europeos dispuestos a defender las fronteras del continente se dio a conocer en París, pocos días después de que Emmanuel Macron reivindicara la creación de un “verdadero ejército europeo”.

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Reuters informa que la Iniciativa de Intervención Europea tomó forma oficial en París “después de meses de negociaciones con Alemania, a quien Francia quiere en el centro de la alianza”.

La inminente salida de la Unión Europea de Gran Bretaña, que durante mucho tiempo se opuso a una colaboración militar entre los países de la Unión Europea fuera de la OTAN, ha reavivado los rumores de una cooperación para la defensa, al igual que la preocupación de que Trump pueda estar menos dispuesto que sus predecesores a defender a Europa ante los recientes y asertivos avances militares de Rusia.

La presión de Macron para la formación voluntaria de esa alianza entre 10 naciones “nació de la impaciencia de los franceses con los esfuerzos de la Unión Europea en la cooperación de defensa”, conocida como Cooperación Estructurada Permanente (Pesco), dice The Economist.

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Apenas unos días después de que Macron reclamara la creación de un “verdadero ejército europeo” para disminuir la dependencia de Estados Unidos, y con el apoyo de figuras importantes en Bruselas, los socios comunitarios volverán a plantearse la creación de un ejército europeo.

Esta última importante predicción sobre una alianza de cooperación militar europea está vinculada a otros acontecimientos que tendrán lugar en el futuro, ya que gran parte de lo que sucederá está relacionado con la participación de Europa en esta última gran guerra.

Pero antes de continuar, usted debe preguntarse: “¿Cómo pudo alguien hacer tales predicciones, que al principio parecían tan ridículas para la mayoría de las personas? ¿Cómo pudo alguien avisar con tanta exactitud sobre lo que sucedería en Europa? Esto en sí mismo debería hacer con que las personas empezasen a dar oídos a esos avisos, ya que él también dijo que después de que estos acontecimientos tuviesen lugar lo siguiente sería una guerra nuclear. ¿Y cuán cerca está esa guerra ahora?

Las predicciones sobre esos cuatro importantes acontecimientos en Europa han demostrado ser ciertas y se han cumplido a lo largo de un período de casi 70 años. Pero lo más importante es la manera cómo las personas han respondido a todo esto.

La razón por la que estoy escribiendo el presente libro tiene mucho que ver con la respuesta de las personas a esas cosas. Además del hecho de que todo esto ha tenido lugar exactamente como él dijo que sucedería, hay muchos otros avisos sobre esas predicciones que ahora se están cumpliendo y que incluso se están intensificando.

Profecías sobre Europa dadas hace 2.500 años

Al profeta Daniel, mencionado en la Biblia, le fueron dadas revelaciones proféticas que están directamente relacionadas con lo que fue revelado sobre Europa a este hombre a casi 70 años atrás.

A unos 2.500 años atrás, después de que la nación de Judá fuera invadida y el pueblo fuera llevado al cautiverio en Babilonia, Dios comenzó a revelar a Daniel muchas cosas de naturaleza profética, cosas que ya se han cumplido, sobre reinos y naciones que se levantarían y caerían. En realidad, el hecho de que esas 10 naciones europeas formarían una alianza en el tiempo del fin comenzó a ser revelado en una ocasión cuando Dios dio a Daniel la capacidad de interpretar un inquietante sueño que tuvo Nabucodonosor, rey de Babilonia.

En ese sueño Nabucodonosor vio una gran estatua que estaba hecha de diferentes tipos de metales. Y solo Daniel pudo decir al rey lo que el rey había soñado y la interpretación de ese sueño. Cuando Nabucodonosor llamó a Daniel a su presencia para que él interpretara el sueño, Daniel le dijo que ningún ser humano podía revelar al rey lo que el rey había soñado, ni siquiera el propio Daniel.

A esto Daniel respondió: “No hay ningún sabio ni hechicero, ni mago o adivino, que pueda explicarte, oh rey, el misterio que te preocupa. Pero hay un Dios en el cielo que revela los misterios. Ese Dios te ha mostrado lo que tendrá lugar en los días venideros. Estos son el sueño y las visiones que pasaron por tu mente mientras dormías… (Daniel 2:27-28)

Dios usó ese sueño para revelar, a través de Daniel, todos los principales reinos que se levantarían en el mundo en los días venideros, hasta el tiempo del fin. En los siguientes versículos Daniel explica lo que el rey vio en su sueño y lo que pasaría a lo largo del tiempo.

En tu sueño, oh rey, veías una estatua enorme, de tamaño impresionante y de aspecto horrible. La cabeza de la estatua era de oro puro, el pecho y los brazos eran de plata, el vientre y los muslos eran de bronce, y las piernas eran de hierro, lo mismo que la mitad de los pies, en tanto que la otra mitad era de barro cocido. Mientras mirabas, se desprendió una piedra, sin intervención de manos, y golpeó los pies de hierro y barro de la estatua, y los hizo pedazos. Con ellos se hicieron añicos el hierro y el barro, junto con el bronce, la plata y el oro. La estatua se hizo polvo, como el que vuela en el verano cuando se trilla el trigo. El viento barrió la estatua, y no quedó ni rastro de ella. En cambio, la roca que dio contra la estatua se convirtió en una montaña enorme que llenó toda la tierra. (Daniel 2:31-35).

Una explicación resumida de esto es que, empezando de la parte superior de la estatua hasta llegar a la parte inferior, esa estatua representa lo que ha pasado a lo largo del tiempo, hasta llegar al tiempo del fin, representado por los dedos de los pies de esa estatua. La primera parte de esa estatua era de oro y representaba el Imperio caldeo-babilónico, del cual Nabucodonosor era el rey, en el reino de Babilonia. Y entonces estaba la parte que era de plata y que representaba el Imperio Medo-Persa. Y después vino el Imperio Greco-Macedonio, representado por la parte de la estatua que era de bronce.

Daniel comenzó la interpretación de ese sueño describiendo la cabeza de la estatua, que era de oro y representaba el reino de Babilonia, sobre el cual Nabucodonosor reinaba. Después Daniel describe el surgimiento y la caída de los principales reinos (imperios) de la tierra a lo largo del tiempo, terminando con la cuarta parte de la estatua, que estaba hecha de una manera única, ya que las piernas eran de hierro y los pies de una mezcla de hierro y barro. Esto representaba el último gran reino que pasaría por varios resurgimientos en Europa.

Los pies estaban hechos de hierro y barro, una mezcla que no forma una buena base para sostener una estatua tan grande. “Piernas de hierro y pies de una mezcla de hierro y barro” es una buena descripción de la lucha que hace muchos siglos viene teniendo lugar en Europa. Gran parte de la historia de Europa está vinculada al Imperio Romano y, más tarde, al Sacro Imperio Romano. Su historia encaja perfectamente en la profecía, que están descritas en diversos lugares de la Biblia.

A Daniel le fue revelado que la parte inferior de esta estatua representaba un reino que se levantaría en el futuro cujas acciones conduciría a acontecimientos que cambiarían este mundo en “los últimos días”. Aunque a Daniel le fue revelado que esta estatua representaba a reinos que se levantarían en el futuro, la identidad de esos reinos aún no era conocida.

Pero la identidad de esos reinos que se levantaron y cayeron a lo largo de la historia, el conocimiento que identifica las naciones de la Europa moderna, también representadas en esta estatua, fue revelado al mismo hombre que predijo estos acontecimientos que ahora ya han sucedido. Este hombre sabía estas cosas gracias al entendimiento que le fue dado de este y de otros avisos en las profecías. Él entendió que habíamos llegado al tiempo del fin. Él creía esto. Y fue Dios quien le reveló todo esto. Porque no hay otra manera de saber Y predecir las cosas que él predijo con tanta precisión, con tanta perfección, si no es por revelación de Dios. Y, como Daniel dijo a Nabucodonosor: “NINGÚN ser humano puede hacer esto”.

Pero, ¿quién era este hombre?

El hombre que comenzó a avisar sobre una tercera guerra mundial y sobre acontecimientos muy específicos que tendrían lugar en Europa fue Herbert W. Armstrong. Antes de su muerte, en 1986, él estuvo al frente de la publicación de millones de ejemplares de libros, folletos y revistas con mucha información sobre el tiempo del fin. Como la revista La Pura Verdad, que era publicada en siete idiomas con un tiraje mensual de más de 8,2 millones de ejemplares. A modo de comparación, en aquel entonces la revista Time, una revista muy conocida, tenía un tiraje de 5,9 millones de ejemplares.

Su programa de televisión semanal, El Mundo de Mañana, y los programas de radio, llegaban a todo Estados Unidos y a gran parte del resto del mundo. El alcance de todo esto era mucho mayor que lo que cualquier otra organización religiosa había hecho hasta entonces o ha hecho hasta ahora.

Es interesante notar que muchas personas en el mundo reconocieron que había algo único y significativo en las cosas que Herbert Armstrong decía. Pero en los Estados Unidos, donde él vivió y trabajó, él fue tratado de una manera muy diferente que en muchas otras naciones.

Personas de todo el mundo comenzaron a demostrarle su reconocimiento principalmente después que él recibiera un premio muy singular de manos del rey Leopoldo III de Bélgica. Se trata de un reloj hecho con una bala de cañón traída de un campo de batalla de la Primera Guerra Mundial. Con esa bala el padre del rey Leopoldo, el rey Alberto I, mandó hacer cuatro cajas de reloj. Su intención era dar esos cuatro relojes a las cuatro personas que, según él, hubiesen hecho la contribución más significativa a la paz mundial. El rey Alberto nunca encontró a nadie que él considerase digno de recibir el cuarto reloj y por eso él lo pasó a su hijo, quien lo regaló a Herbert Armstrong en 1970.

A partir de entonces Herbert Armstrong comenzó a recibir cada vez más reconocimiento por parte de otros líderes mundiales y era conocido entre muchos de ellos como “el embajador sin cartera para la paz mundial”. Él llevó su mensaje al príncipe Mikasa y a varios miembros del Diet, el parlamento japonés. El emperador Hirohito confirió a Herbert Armstrong la condecoración del Orden del Tesoro Sagrado de Segunda Clase, uno de los honores más grandes que se puede dar a una persona que no es japonesa. Durante un período que abarcó dos décadas, siete primeros ministros japoneses consecutivos tuvieron a Herbert Armstrong como consejero y amigo personal. Algunos miembros del parlamento japonés solían decir que ellos eran los hijos japoneses de Herbert Armstrong. Pero, aunque estos gobernantes mostraron una gran admiración por Herbert Armstrong, ninguno de ellos dio oídos a su mensaje de advertencia sobre el tiempo del fin.

Herbert Armstrong fue amigo cercano del rey Hussein de Jordania, del rey Bhumibol Adulyadej y la reina Sirikit de Tailandia, y de primeros ministros de Israel como Golda Meir y Menachem Begin. Otros que lo tenían como amigo personal fueron el presidente egipcio, Anwar Sadat, Jomo Kenyatta, fundador y primer presidente de Kenia, el emperador Haile Selassie de Etiopí y el alcalde de Jerusalén, Teddy Kollek. Él también mantuvo una larga amistad con Nagendra Singh, juez del Tribunal Mundial en La Haya, Países Bajos.

Herbert Armstrong fue recibido por otros líderes mundiales como la Primera Ministra del Reino Unido, Margaret Thatcher, Juan Carlos, rey de España, el presidente egipcio, Hosni Mubarak y la Primera Ministra de la India, Indira Gandhi. Pero ninguno de esos líderes mundiales dio oídos al mensaje que él llevó a ellos.

El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos, condecoró a Herbert Armstrong con la Medalla al Mérito Presidencial “por su apoyo moral y convincente influencia para promover la creación de un orden mundial justo y pacífico”. Él también recibió la condecoración de “Comandante de la Orden Más Nobel de la Corona de Tailandia”. Pero ninguno de esos mandatarios o los ciudadanos de sus países dieron oídos a su mensaje de advertencia.

Herbert Armstrong también se entrevistó con el presidente Allende de Chile, con el presidente Suharto de Indonesia, con el presidente de Vietnam del Sur, Nguyen Van Thieu y fue invitado a ir a Rumania por el presidente Nicolae Ceausescu.

Herbert Armstrong también se entrevistó con Deng Xiaoping, de la República Popular de China y fue el primer reconocido líder religioso cristiano a visitar oficialmente a los gobernantes de China. Sin embargo, esto no salió en las noticias. En esta visita sin precedentes él habló a funcionarios de 76 naciones en el Gran Salón del Pueblo en Beijing sobre el camino hacia la verdadera paz y les explicó por qué los seres humanos no pueden lograr la paz. Ningún otro líder religioso ha sido invitado a un evento de este tipo en China, pero nada de esto ha salido en las noticias, en ningún medio de comunicación.

Herbert Armstrong recibió muchos otros honores y se entrevistó con muchos otros líderes mundiales, pero el mundo occidental nunca supo quien era Herbert Armstrong, el hombre a quien Dios había enviado para proclamar Su mensaje.

Profecías del tiempo del fin sobre los EE. UU.

Herbert Armstrong no solo predijo acontecimientos específicos sobre la Unión Europea, que ahora ya se han cumplido, pero él también predijo cosas muy específicas sobre las más importantes naciones modernas.

Según la profecía la nación que ha recibido los más importantes avisos, y durante más tiempo, también será la primera nación en caer. Herbert Armstrong escribió sus principales predicciones en el libro Los Estados Unidos y Gran Bretaña en la Profecía. Sin embargo, Estados Unidos es la nación en la que Herbert Armstrong fue más despreciado, ya que él fue difamado, falsamente acusado, odiado y perseguido por el gobierno de su propio país.

Y mismo ahora después de más de tres décadas y media de su muerte, todavía hay muchas personas que escriben cosas sobre él expresando el gran odio que le tienen. Esto no es en nada diferente a lo que le sucedió a Cristo, quien también fue odiado por muchos debido al mensaje que él fue enviado a traer a los seres humanos. La mayoría de las veces ese odio en realidad es contra el “mensaje” y no contra el que lo proclama.

A lo largo de la historia, los seres humanos han sido muy constantes en su rechazo a que Dios se inmiscuya en sus asuntos. ¿Y cómo nos ha ido? Dios ha creado todas las cosas, nos ha dado este impresionante planeta en el que vivimos, ¡pero miren lo que estamos haciendo con nuestro planeta! Especialmente ahora, con todos los avances de la tecnología. Hemos contaminado mucho más el planeta Tierra en las últimas dos décadas que en todos los miles de años anteriores juntos.

Con el constante crecimiento de la población y el abuso generalizado de la tecnología, los seres humanos solo están probando lo que Dios dijo que sucedería si seguimos sin hacer caso a Él. Vamos a seguir destruyendo Su creación. Dios ha revelado que si Él no interviene terminaremos por aniquilarnos a nosotros mismos.

Hasta ahora, en esta era moderna, los seres humanos no poseían esta capacidad de destruir el planeta. Pero ahora podemos hacer esto debido al explosivo desarrollo de la tecnología. Es debido al mal uso de la tecnología que los seres humanos ahora tienen la capacidad de destruir a sí mismos y al planeta Tierra.

Durante varias décadas la verdad sobre los acontecimientos del tiempo del fin ha sido predicada a lo largo de los Estados Unidos, pero a las personas eso parece no importarles. Y debo decir nuevamente que Herbert Armstrong comenzó a avisar al mundo sobre los acontecimientos del tiempo del fin luego después de la Segunda Guerra Mundial. Ese mensaje de aviso ha sido difundido muy claramente en todo Estados Unidos, pero tanto la población como los líderes de esa nación no hicieron caso a ese mensaje. Ellos no dieron oídos.

Esa propensión a no hacer caso y a no dar oídos a esos avisos solo ha empeorado a lo largo de los años, desde que Herbert Armstrong murió, en 1986. Esta apatía ha sido estimulada y acelerada por el rápido desarrollo de la tecnología, y ahora otras naciones del mundo se han contagiado con este mismo espíritu, con esa actitud que ha estado tan presente en los Estados Unidos hace ya algún tiempo.

Ese espíritu, que provoca una sordera consciente a los avisos sobre una guerra nuclear que tendrá lugar en este tiempo del fin, es la verdadera razón por la cual he escrito este quinto libro. El enfoque de los cuatro libros que he escrito antes de este ha sido avisar sobre las catástrofes de la Tercera Guerra Mundial, que está a punto de estallar en este mundo.

En el primer libro, El Profetizado Tiempo del Fin, que fue publicado en junio de 2004, he escrito sobre profecías que van más allá de lo que Herbert Armstrong predijo sobre la Unión Europea. Además, en ese libro yo he explicado la verdad sobre los acontecimientos del tiempo del fin mencionados en el libro de Apocalipsis, más conocidos como “Los Cuatro jinetes del Apocalipsis”. Los seguidores del cristianismo tradicional interpretan erróneamente lo que está escrito en la Biblia sobre el tiempo del fin y todavía están esperando a que esos acontecimientos se cumplan. Pero el cumplimiento de esos acontecimientos ya empezó aparecer en la escena mundial en 1994.

El segundo libro, 2008: El Último Testimonio de Dios, fue publicado en 2006. En este libro yo he escrito sobre las profecías sobre los dos testigos mencionados en el Libro de Apocalipsis, que aparecerán en la escena mundial de una manera muy activa cuando los catastróficos acontecimientos del tiempo del fin hayan comenzado a tener lugar. Además, en este libro yo he escrito sobre los Siete Truenos del Apocalipsis y he explicado de qué se tratan. El primer importante acontecimiento anunciado por esos Truenos comenzó con los ataques del 11 de septiembre de 2001.

En este libro yo también he avisado claramente sobre el colapso económico mundial que tuvo lugar en 2008. Algo al que los economistas siguen refiriéndose hasta el día de hoy, comparando lo que está sucediendo ahora con lo que ocurrió en 2008.

El tercer libro, Profetiza Contra las Naciones, fue publicado diez años después, en 2016. El enfoque de ese libro es un mensaje de Dios para el tiempo del fin, cuando los catastróficos acontecimientos comiencen a tener lugar: Si las naciones dan oídos a Dios, Él, a Su vez, las escuchará.

El cuarto libro, Cuando Termine la Cuenta Atrás, fue publicado en mayo de 2020. En ese libro yo he descrito detalladamente la secuencia de ciertos acontecimientos que han estado teniendo lugar desde 1994. Acontecimientos que forman parte de una profetizada cuenta atrás para la Tercera Guerra Mundial. Después que he escrito ese libro, quedó claro lo mucho y lo rápido que el mundo había empeorado desde que el segundo libro fue publicado, en 2006. Esto también es una importante señal de lo cerca que estamos de esa última guerra.

Cuando ese cuarto libro - en el que he escrito sobre una cuenta atrás muy específica para el final de esta era - fue publicado era raro encontrar en las noticias artículos que mostrasen alguna preocupación por una inminente guerra mundial. Pero ahora si usted investiga un poco en las noticias mundiales usted puede encontrar esos artículos muy a menudo. Pero las personas parecen no darse cuenta de esas cosas y tampoco se muestran preocupadas por ellas. No como deberían.

Y, al igual que sucedió antes de la Segunda Guerra Mundial, la mayoría de las personas están como que dormidas y no se dan cuenta de la amenaza de otra guerra mundial que se cierne sobre el mundo. Ha sido solo en el último año que algunas personas han comenzado a mostrar señales de preocupación de que el mundo pueda estar yendo en dirección a otra guerra mundial. Pero es como si esas personas se hubiesen despertado de un profundo sueño y todavía estuviesen muy aturdidas. Las personas descubrirán que ya es demasiado tarde para abordar estos asuntos a nivel nacional, porque la mayoría permanecerá dormida. Y solo cuando esa guerra sea una realidad, una guerra nuclear, las personas comenzarán a despertarse. ¡Pero entonces será demasiado tarde!

La extrema locura: una guerra nuclear

Muchas guerras han tenido lugar en el mundo a lo largo de los siglos. Pero, en el siglo pasado las guerras se han vuelto cada vez más devastadoras debido al rápido desarrollo de la tecnología. Ya casi al final de la Segunda Guerra Mundial el mundo tembló en sus bases cuando las dos primeras bombas atómicas fueron lanzadas sobre Japón. Y dos de estas nuevas bombas fueron suficientes para matar a casi 200.000 personas.

Esas dos bombas en realidad no eran muy potentes en comparación con las armas nucleares que los seres humanos han desarrollado desde entonces. Las armas nucleares de ahora son casi 4.000 veces más potentes. Y es muy difícil de comprender, o siquiera imaginar, la destrucción que esas armas pueden causar.

Las nubes de humo de las dos primeras bombas nucleares llegaron a unos 7.600 metros (7,6 kilómetros) de altitud. La nube de humo de la Bomba del Zar (AN602), que los rusos lanzaron en 1961, llegó a más de 64 kilómetros de altitud, enviando ondas de choque casi tres veces más potentes por todo el mundo. Algo tan potente es casi inimaginable. El destello producido por la explosión pudo ser visto desde unos 1.000 kilómetros de distancia. La explosión destruyó completamente a un pueblo deshabitado que estaba a 55 km del núcleo de la explosión y edificios que estaban hasta 160 km a la redonda sufrieron daños considerables. Un dispositivo así podría reducir a cenizas a ciudades como Los Ángeles o Nueva York.

Antes del desarrollo de las armas nucleares los seres humanos no tenían la capacidad para destruir toda vida en el planeta Tierra. Y ahora el mundo está cada vez más cerca de usar esas armas, ya que los seres humanos siempre han usado las armas de guerra que ellos han inventado. Aunque ahora esto pueda parecer algo impensable, las naciones comenzarán a usar armas nucleares cuando las primeras bombas sean lanzadas sobre Estados Unidos.

La locura de la presente era está a punto de llegar a su apogeo – dejando de manifiesto el despropósito de la manera de pensar de lo seres humanos – cuando este mundo se sumerja en una pesadilla nuclear.

En agosto de 1945, cuando dos bombas nucleares fueron lanzadas sobre Japón, el mundo ha entrado en una nueva. Esto fue el comienzo de algo que Dios dijo que pasaría hace mucho tiempo. En muchas profecías Dios revela lo que iba a pasar en el tiempo del fin. Y esto no significa el fin de los seres humanos, pero el fin de una era y el comienzo de una nueva era.

Más predicciones para nuestro tiempo, para AHORA

Dios ha mostrado evidencias que respaldan Sus avisos de que cuando acontecimientos específicos tuviesen lugar en Europa, pronto seguiría una última guerra mundial. Herbert Armstrong ha avisado al mundo sobre lo que tendrá lugar en Europa antes de que comience esa guerra. Además de las previas profecías sobre el tiempo del fin, que ya se han cumplido, ha muchas otras profecías sobre esto en la Biblia; profecías que empezarán a cumplirse muy pronto. Algunas de esas profecías ya han comenzado a cumplirse. Esos acontecimientos proféticos, que el mundo no ha reconocido como tal, incluyen lo que pasó el 11 de septiembre del 2001, el colapso económico de 2008 y también la pandemia del coronavirus.

Este tipo de acontecimientos se intensificarán en frecuencia y en la magnitud de su impacto en todas las naciones de la tierra. Saber que todavía quedan por cumplir otros acontecimientos que han sido profetizados puede darnos la fuerza que tanto necesitamos para hacer frente a lo que ahora se avecina.

Y para poder aprender más sobre cómo Dios está revelando esas cosas ahora primero debemos centrarnos en algunos de los horribles acontecimientos que han sido profetizados y que van a suceder. Estos acontecimientos han sido descritos aún más específicamente y pueden ser identificados más fácilmente que las predicciones de Herbert Armstrong sobre el surgimiento de la Unión Europea.

La realidad es que vivimos en tiempos extremadamente inestables. Esos catastróficos acontecimientos pronto comenzarán a tener lugar en todo el mundo, sin importar lo que las personas piensen, crean o hagan. Todo esto va a suceder, al igual que todos los acontecimientos relacionados con Europa ya han sucedido ahora.

Aunque no es nada agradable pensar en estos acontecimientos proféticos, usted debe entender por qué es necesario que Dios permita que esas cosas sucedan antes de que Él finalmente pueda dar a los seres humanos un mundo mucho mejor.

El mundo está al borde del precipicio. Y las cosas solo están empeorando, cada vez más. Revoluciones y guerras van y vienen, pero nada cambia. Gobernantes entran y salen de los gobiernos, pero los grandes cambios que pueden mejorar la vida de las personas nunca tienen lugar. Lo que las personas quieren son cambios verdaderamente importantes, pero esto el algo que al parecer nadie puede lograr.

¿Y por qué Dios ha permitido que el mundo siga su curso hasta ahora, generación tras generación? ¿Por qué Dios va a permitir que más de 1/3 de toda la vida en el planeta Tierra sea destruida? ¿Por qué Dios va a permitir que esa profetizada destrucción tenga lugar justo ahora, en nuestra época? ¿Cuál es el propósito de todo esto?

Si esta última guerra no significa el fin de los seres humanos, ¿qué pasará después? Estas son preguntas importantes, cuyas respuestas son realmente asombrosas. ¡Y hay buenas noticias sobre lo que vendrá después!