LA CAÍDA  de  los
ESTADOS UNIDOS

Acontecimientos proféticos del tiempo del fin que derribarán a la nación más poderosa del mundo y desencadenarán la Tercera Guerra Mundial POR RONALD WEINLAND

Capítulo 5
LA DESTRUCCIÓN DEL TIEMPO DEL FIN EN LOS DOS CRISTIANISMOS



EL TEMA PRINCIPAL DEL LIBRO de Apocalipsis es los profetizados acontecimientos que se cumplirán en el tiempo del fin. Y, como ya he mostrado en el presente libro, muchos de estos acontecimientos ya se han cumplido durante los últimos 70 años, pero las personas en el mundo no saben nada sobre esto.

La mayoría de los acontecimientos que han sido profetizados se han estado cumpliendo en los últimos 30 años. Y ahora esos acontecimientos son cada vez más frecuentes y se cumplen cada vez más rápido. Recuerde que el cumplimiento de esas profecías es comparado con una mujer con dolores de parto. Y, como ya he explicado, las personas en el mundo solo empezarán a entender y a reconocer que lo que está pasando es el cumplimiento de esas profecías cuando los Estados Unidos sean atacados y casi totalmente destruidos debido a los acontecimientos anunciados por las primeras cinco Trompetas de Apocalipsis.

Además de predecir toda esa destrucción a nivel físico, en el libro de Apocalipsis también hay profecías sobre catastróficos acontecimientos que tendrían lugar en el tiempo del fin entre los dos principales grupos del cristianismo, que, como he descrito en el capítulo anterior, son grupos totalmente opuestos entre sí.

Algunos de esos catastróficos acontecimientos ya han tenido lugar en uno de esos grupos, el que fue fundado en el año 31 d.C. y que se llama la Iglesia de Dios. El cumplimiento de los acontecimientos anunciados por los primeros cinco Sellos de Apocalipsis tiene que ver con estos apocalípticos acontecimientos, de los que hablaré en la última parte del presente capítulo.


DESTRUCCIÓN DEL TIEMPO DEL FIN EN EL CRISTIANISMO QUE COMENZÓ EN EL AÑO 325 d.C.

Según la profecía, el grupo del cristianismo tradicional que fue formalmente establecido en el año 325 d.C. aún pasará por una catastrófica destrucción. Para comprender mejor lo que ha sido profetizado en el libro de Apocalipsis sobre estos acontecimientos, que se cumplirán durante la Tercera Guerra Mundial, es necesario conocer un poco la historia relacionada a esto.

Estos acontecimientos están directamente relacionados con lo que he escrito en el capítulo 2 sobre los siete profetizados resurgimientos del antiguo Imperio Romano. Principalmente el último de ellos, que involucra diez naciones de Europa.


El origen del nombre Europa

Hay una palabra griega - que usted puede buscar en Internet - que está relacionada con la formación del continente europeo y sus creencias religiosas de hoy. Esa palabra es Europa, un nombre que proviene de la mitología griega. Según la mitología griega Europa era una princesa fenicia que fue secuestrada por el dios Zeus, que, tomando la forma de un toro blanco, la llevó a Creta sobre sus lomos. El continente europeo ha sido nombrado en honor a esa princesa. Y esto está relacionado con las ideas religiosas que empezaron a surgir en esa región y que se extendieron por todo el mundo.

Es interesante notar que cuando el euro fue introducido como la nueva moneda de la Unión Europea, cada país eligió un símbolo para la moneda de dos euros. Y Grecia eligió el símbolo de una mujer montada en un toro, que representa Europa y otras cosas más. Y, como podemos leer en el libro de Apocalipsis, este simbolismo es muy importante.

Uno de los siete ángeles que tenían las siete copas se me acercó y me dijo: “Ven, y te mostraré el castigo de la gran prostituta que está sentada sobre muchas aguas. Los reyes de la tierra cometieron adulterio con ella, y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su inmoralidad”. Luego el ángel me llevó en espíritu a un desierto. Allí vi a una mujer montada en una bestia escarlata. La bestia estaba cubierta de nombres de blasfemia contra Dios, y tenía siete cabezas y diez cuernos.” (Apocalipsis 17:1-3).

Estos versículos son proféticos y se refieren a los siete resurgimientos de Europa. El último de ellos es representado por los diez cuernos. Estos diez cuernos representan a diez naciones que se unirán en una alianza militar y usarán armas nucleares durante el cumplimiento de los acontecimientos anunciados por la Quinta Trompeta.

Dios usa el símbolo de una mujer sentada sobre una bestia para describir el vínculo entre el gobierno del profetizado Imperio Europeo y sus falsas creencias religiosas en todos sus resurgimientos a lo largo del tiempo. La influencia de muchas deidades está profundamente arraigada en la formación y en el surgimiento del Imperio Romano, de ese profético Imperio Europeo que seguiría existiendo hasta el tiempo del fin y hasta la última guerra de los seres humanos.

En el primer párrafo de un artículo en Wikipedia, bajo el título Lista de deidades romanas, usted puede encontrar un resumen de todo lo que usted necesita saber sobre la formación del Imperio Romano desde sus comienzos.

Entre los más conocidos están los que se identificaban con los dioses griegos, que integraban los mitos e iconografía griegos, y en ocasiones las prácticas religiosas asociadas, en la cultura romana, incluyendo la literatura, el arte y la vida religiosa, como se puede notar durante todo el período imperial.

Como ya he explicado en el capítulo anterior, los romanos solían adoptar los dioses y costumbres religiosas de los pueblos que ellos conquistaban y mezclarlos con sus propias creencias. Y las creencias y costumbres religiosas resultantes de esto han ido cambiando gradualmente a lo largo de los siglos hasta que finalmente fueron unificadas en lo que se conoce como “cristianismo en el Imperio Romano”.

Y por eso hoy usted puede identificar el verdadero origen de misteriosas enseñanzas y creencias cuyo origen no tiene nada que ver con la verdad bíblica, con ninguna doctrina o enseñanza de la Biblia. Todo lo contrario. Todas esas ideas y enseñanzas sobre la pascua, las navidades, la doctrina de la trinidad, el símbolo de la cruz, el culto dominical, el culto al sol al amanecer del domingo de pascua, el culto a la imagen de una madre con un niño en brazos, el conejito y los huevos de pascua que en realidad son símbolos de fertilidad, y muchísimas cosas más son parte de las doctrinas y costumbres religiosas de más de 2 mil millones de personas en el planeta Tierra. En pocas palabras, las ideas que formaban la base de la nueva religión romana provenían de las ideas y costumbres religiosas de los que creían en las antiguas deidades.

En la Biblia Dios nos avisa muchas veces del peligro de mezclar doctrinas, costumbres religiosas y creencias en falsos dioses con lo que Él ha revelado como la verdadera manera de adorarlo. Pero, como los seres humanos han ignorado a Dios y han contaminado aún más la verdad de Dios con fábulas y costumbres de las falsas religiones, Dios ahora está juzgando al mundo por esto. Y durante este tiempo de juicio Dios va a destruir a todos los gobiernos y religiones del mundo y va a establecer Su Reino, que va a gobernar sobre todas las naciones de la tierra.


Cubierta de nombres de blasfemia contra Dios

Si usted mira la historia del Imperio Romano desde el comienzo y ve todas las reformas de sus ideas religiosas esto puede ayudarle a entender la verdad sobre todo lo que ha ido siendo cambiado a lo largo del tiempo en esa religión resultando en lo que hoy se conoce como “cristianismo tradicional”. El cristianismo tradicional tiene sus raíces en esa misma costumbre de mezclar todo tipo de creencias.

De hecho, los romanos tenían la costumbre de mezclar las creencias religiosas y los dioses de otros pueblos con sus propios dioses. Cuando ellos conquistaban una nación ellos simplemente aceptaban sus creencias porque esto fomentaba la cohesión entre los diferentes pueblos que estaban bajo su dominio y facilitaba la expansión del imperio. Y ellos no mezclaron solamente las creencias de los griegos, celtas y germánicos, sino que, siguiendo esa costumbre, ellos también mezclaron con sus creencias las creencias del judaísmo y de los que se mantenían fieles a las creencias y doctrinas del verdadero cristianismo en el Imperio Romano.

Sus creencias también incluían la creencia en muchas deidades. Y por eso Dios describe esta bestia en Apocalipsis 17 como el mítico dios Zeus en forma de un toro blanco llevando a la princesa Europa en sus lomos hasta la isla de Creta. Creta es la isla más grande y poblada de Grecia, y es históricamente conocida por haber sido el centro de la primera civilización desarrollada de Europa - los minoicos - del año 2700 al año 1420 a. C.

Aunque este toro mitológico era de color blanco, Dios lo describe como una bestia de color escarlata con siete cabezas y diez cuernos. El color escarlata era un símbolo de riqueza y poder en el Imperio Romano y es usado proféticamente aquí para representar el sistema de gobierno y la religión del Imperio Romano.

Proféticamente este color también representa la prostitución y el adulterio. Así es como Dios describe proféticamente lo que sucedió con la religión en el Imperio Romano, resultando en un falso cristianismo. Esos versículos de Apocalipsis 17 hablan sobre el castigoque vendrásobre “la gran prostituta que está sentada sobre muchas aguas, con la que los reyes de la tierra cometieron adulterio y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su inmoralidad”.

Y cuando dice, “vi a una mujer montada en una bestia escarlata. La bestia estaba cubierta de nombres de blasfemia” es necesario entender el propósito de tal afirmación. El nombre Europa, que tiene su origen en un cuento de la mitología griega, encarna ese mismo proceso a través del cual un “falso cristianismo” fue creado. Esa costumbre que ellos tenían en el Imperio Romano de mezclar mitología, creencias, costumbres religiosas e ideas relacionadas con muchos dioses también ha sido usada para crear un cristianismo falso.

Y debido a que esa costumbre está tan profundamente arraigada en la institución del cristianismo tradicional, esto es descrito proféticamente como “cubierta de nombres de blasfemia”. Esto es una blasfemia contra Dios porque ellos se otorgaron el derecho de cambiar o ir en contra de lo que Dios ha revelado sobre cómo debemos adorarlo, de lo que es verdadero y correcto.

Lo que Juan describe en el capítulo 17 como “una mujer montada en una bestia escarlata que estaba cubierta de nombres de blasfemia” es exactamente lo mismo que él describe en Apocalipsis 13.

Y yo me paré sobre la arena del mar, y vi una bestia subir del mar, que tenía siete cabezas y diez cuernos. Sobre sus cuernos tenía diez diademas, y sobre sus cabezas había un nombre de blasfemia. (Apocalipsis 13:1).

Y adoraron al dragón [Satanás] porque había dado su autoridad a la bestia. También adoraban a la bestia y decían: “¿Quién es como la bestia? ¿Quién puede combatirla?” A la bestia se le permitió hablar con arrogancia y proferir blasfemias contra Dios, y se le confirió autoridad para actuar durante cuarenta y dos meses. Y la bestia abrió la boca para blasfemar contra Dios, para maldecir Su nombre y Su morada [Su tabernáculo] y a los que viven en el cielo. (Apocalipsis 13:4-6).

Estos versículos dejan claro que la institución del falso cristianismo está cubierta de blasfemia. Ya he dado ejemplos de esto. Como el hecho de que ellos dicen que Dios es una trinidad. Como el hecho de que ellos cambiaron el nombre de Josué, el Cristo, llamándole Jesús. Y hay personas que afirman con bastante seguridad que el nombre Jesús en realidad proviene del nombre Zeus, aunque después de tantos siglos es difícil de probar si esto es cierto o no.

Y la descripción “nombres de blasfemia” se refiere a mucho más que solamente nombres. Esa descripción también abarca cosas de la mitología usadas en la adoración a Dios. Obras de arte, esculturas que eran usadas en la adoración de los dioses de la mitología y que se han mezclado con la adoración a Dios en el falso cristianismo. La descripción “cubierta de nombres de blasfemia” también se refiere a esas cosas. De hecho, esa descripción abarca muchísimas cosas que han sido incorporadas al falso cristianismo. Y aunque ya he mencionado muchas de esas cosas, es necesario mencionarlas nuevamente.

El Sabbat de Dios, que es en el séptimo día de la semana, fue cambiado al culto dominical, en el primer día de la semana. [En ingles el nombre de ese día de la semana es Sunday, que traducido al pie de la letra significa el día del sol].

La ceremonia del bautismo, en la que una persona adulta elige arrepentirse de sus pecados y es sumergida en agua, también ha sido blasfemada. Ellos se limitan a rociar agua sobre la cabeza de los bebes y llaman a esto “bautismo”. Aunque la propia palabra bautismo proviene de una palabra griega que significa “sumergir”.

Las iglesias del falso cristianismo están llenas de obras de arte y otros objetos de adoración que en realidad son símbolos que tienen su origen en las costumbres, falsas doctrinas y en la adoración a falsos dioses. Muchas de esas cosas han sido incorporadas al falso cristianismo y son usadas exactamente de la manera que eran usadas en las religiones paganas. Las obras de arte que representan a estos falsos dioses a menudo retratan escenas del cielo y del infierno. El símbolo de la cruz y objetos religiosos como estatuas de una madre con un hijo en brazos ya eran usados en la adoración de falsos dioses muchos siglos antes de que Cristo naciera de María. Todas estas cosas han sido mezcladas en el falso cristianismo.

Y no hay que olvidar todos los actos de blasfemia perpetrados por Constantino, quien convocó y presidió el Concilio de Nicea en el año 325 d.C. Entonces una nueva religión fue fundada. Religión que se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano y adoptó el nombre de “cristianismo”.

Dios ordenó a Su pueblo observar el Pesaj una vez al año. Y este mandamiento es perpetuo, es para siempre. En esa ceremonia debemos comer un pequeño trozo de pan sin levadura y beber un poco de vino. Pero ellos cambiaron esto e instituyeron una ceremonia que ellos llaman santa comunión y que ellos suelen observar semanalmente.

Una de las definiciones de la palabra blasfemia es “lo que es sacrílego contra Dios o las cosas sagradas”. O sea, falta de respeto a Dios. Cambiar el nombre del Hijo de Dios por un nombre diferente al nombre que Dios le ha dado es una blasfemia. Decir que Dios es una trinidad es una blasfemia. Dios revela claramente que solo Él siempre ha existido y nadie más. Ni mismo Su propio Hijo existía antes de nacer como ser humano, de una madre humana. Dios deja esto en claro.

Yo soy el SEÑOR [YAHWEH en hebraico, que significa Eterno], y no hay otro. No hay Dios [en hebraico esa palabra es Elohim] además de Mí. Yo te ciño, aunque tú no Me conoces, para que desde el nacimiento del sol y hasta el occidente se sepa que no hay nadie más que Yo. Yo soy el SEÑOR, [YAHWEH] y no hay otro. (Isaías 45:5-6).

Porque así dice el SEÑOR [YAHWEH, Dios Eterno] el que creó los cielos; el Dios [Elohim] que formó la tierra, que la hizo y la estableció; que no la creó para dejarla vacía, sino que la formó para ser habitada: “Yo soy el SEÑOR, [YAHWEH, Dios Eterno] y no hay ningún otro.” (Isaías 45:18).

Aquí, y en muchos otros versículos de la Biblia, Dios explica muy claramente que solo Él siempre ha existido. Pero esa iglesia que fue fundada en el Imperio Romano dice que Dios es una trinidad. Y esto, por definición, es una blasfemia. En el Concilio de Nicea quedó establecido que en lugar de celebrar el Pesaj las personas debían celebrar la pascua, quedando prohibido en todo el Imperio Romano celebrar el Pesaj. La pascua es una observancia religiosa que tiene su origen en el culto a una diosa que era adorada en muchas culturas antiguas.

El cristianismo instituido por el Imperio Romano enseña cosas sobre Cristo que no son verdad. Como, por ejemplo, cuándo Cristo murió y cuándo él fue resucitado. Y con base en esas mentiras ellos establecieron el culto dominical. Ellos también enseñan que Cristo murió clavado en una cruz. Ellos llaman a Cristo por un nombre que no es el suyo y celebran supuestamente su cumpleaños en invierno, en una fecha muy diferente a la fecha en que Cristo nació. ¿Y no encajan esas y muchas otras mentiras perfectamente en la definición de blasfemia?

He mencionado antes lo que Cristo dijo sobre los títulos religiosos pertenecientes a Dios. Cristo ordenó que esos títulos nunca deben ser usados ​​por ningún religioso, pero miles de personas que dicen servir a Dios usan esos títulos. Los líderes de la iglesia católica y de las demás iglesias derivadas de ella han blasfemado el nombre de Dios usurpando títulos como Padre, Reverendo, Papa, Cardenal (que generalmente llevan vestimentas de color escarlata) y muchos otros títulos más. Esos líderes religiosos se han otorgado el derecho de absolver a las personas de sus pecados. Pero esto es algo que solo Dios Todopoderoso puede hacer, a través del sacrificio de Su Hijo como nuestro Pesaj. La sangre de Cristo fue derramada para que través de él todos los seres humanos puedan ser perdonados de sus pecados.

La pregunta que usted debería hacerse es: “¿Qué es verdadero y qué es falso en todo esto?” Solo lo que es falso puede blasfemar contra Dios y Su nombre. Usar de manera equivocada el nombre de Dios y Sus verdaderas palabras, que están escritas en la Biblia, es blasfemia. Tergiversar, distorsionar y traducir mal lo que Dios ha dicho es por definición una blasfemia.


La mujer montada en la bestia

¿Quién es esta mujer que cabalga sobre la bestia mencionada en Apocalipsis 17? Llegado a este punto el lector ya ha leído lo suficiente como para poder responder a esta pregunta honesta y sinceramente. Sería bueno volver a leer esos versículos antes de continuar, para entender más claramente este séptimo y último resurgimiento que se está cumpliendo en ese exacto momento.

“Uno de los siete ángeles que tenían las siete copas se me acercó y me dijo: “Ven, y te mostraré el castigo de la gran prostituta que está sentada sobre muchas aguas. Los reyes de la tierra cometieron adulterio con ella, y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su inmoralidad”. Luego el ángel me llevó en el espíritu a un desierto. Allí vi a una mujer montada en una bestia escarlata. La bestia estaba cubierta de nombres de blasfemia contra Dios, y tenía siete cabezas y diez cuernos.” (Apocalipsis 17:1-3).

Esta mujer, que representa a Europa, simboliza la religión que fue fundada en el Imperio Romano. Proféticamente, una mujer representa una iglesia. La Biblia se refiere a la propia Iglesia de Dios como siendo una mujer, como “la madre de todos nosotros”. El propósito de Dios es alimentar y preparar a Su pueblo a través de Su Iglesia. Sin embargo, la mujer descrita en esos versículos no se refiere a la Iglesia de Dios, sino a una iglesia que alimenta a las personas con sus blasfemias y las emborracha con sus creencias y doctrinas.

La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada con oro, piedras preciosas y perlas. Tenía en la mano una copa de oro llena de abominaciones y de la inmundicia de sus adulterios. En la frente llevaba escrito un nombre: misterio, la gran babilonia madre de las prostitutas y de las abominables idolatrías de la tierra. Vi que la mujer se había emborrachado con la sangre de los santos y de los mártires de Josué, el Cristo. Al verla, quedé sumamente asombrado. Entonces el ángel me dijo: “¿Por qué te asombras? Yo te explicaré el misterio de esa mujer y de la bestia de siete cabezas y diez cuernos en la que va montada. (Apocalipsis 17:4-7).

Si usted entiende lo que representa esa “mujer” mencionada aquí es muy fácil comprender lo que Dios está describiendo al usar ese simbolismo profético. Aquí es dicho que esa mujer, que representa una iglesia, está vestida de purpura y escarlata. Lo que significa que ella posee grandes riquezas y hace alarde de esto. Los templos de esa iglesia siempre están en lugares donde todos los pueden ver. En Europa sus templos siempre están en el centro de las ciudades y están construidos de tal manera que todos pueden ver el sacrificio y las riquezas empleados en su construcción.

También está escrito que esa mujer tiene en la mano una copa de oro. Y esto es otro de los símbolos que son usados en sus rituales, mostrando cómo sus enseñanzas usan la palabra de Dios para blasfemar. Dios ordena a Su pueblo celebrar la ceremonia del Pesaj una vez al año, en la noche del Pesaj. Y en esa ceremonia debemos tomar un poco de vino, que como he mencionado antes, representa la sangre de Cristo que fue derramada por nosotros para el perdón de nuestros pecados. Esto muestra que Cristo cumplió el significado del Pesaj al morir como nuestro cordero del Pesaj. Y los que toman ese poco de vino en la ceremonia del Pesaj no lo toman de una copa de oro.

Pero lo que enseña esa iglesia que fue fundada en el Imperio Romano es que una persona puede hacer esto todas las semanas en lo que ellos llaman de santa comunión, y que ellos celebran durante la segunda y más importante parte de su culto de adoración. Ese culto se llama misa y durante la segunda parte de la misa ellos celebran lo que ellos llaman eucaristía. En la oración eucarística esa iglesia “recuerda a Jesucristo y su obra redentora, especialmente el sacrificio que él hizo por toda la humanidad cuando él fue crucificado”.

¿Y qué es verdadero y qué es falso? ¿La santa comunión en una ceremonia que ellos llaman de eucaristía o el Pesaj, que debe ser celebrado solamente una vez al año? ¿Son esas cosas importantes para Dios? La verdad es que algo que ha sido tan tergiversado, que es tan diferente a lo que Dios y Josué el Cristo ordenan es una abominación a Dios. Dios dice que cambiar Sus mandamientos, especialmente en lo que se refiere a las costumbres de adorar a dioses hechos por manos de hombres, es adulterio y fornicación espiritual, porque esto es infidelidad a Dios y a Su verdadera palabra.

Y esa mujer es descrita como una prostituta, una adultera, una persona libertina en lo que respeta a las relaciones sexuales. Y esto simboliza lo que hacen las personas que mezclan las falsas religiones con la palabra de Dios. Si usted mira esto de un punto de vista espiritual, del punto de vista de cómo debe ser nuestra relación con Dios, una relación fiel, en espíritu y en verdad, entonces esto adquiere un significado mucho más profundo.

Esa mujer es descrita como una prostituta montada sobre la bestia y también dice que ella es la madre de prostitutas. Y esto significa que muchas otras prostitutas salieron de ella. Y esto debería ser obvio para cualquier persona que esté dispuesta a ver la verdad. Muchas iglesias surgieron a partir de esa iglesia que fue fundada en el año 325 d.C. y que se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano. Y sus hijas permanecen fieles a la mayoría de sus falsas doctrinas.

Esa iglesia también es llamada de “misterio, la gran Babilonia” porque sus enseñanzas (sus palabras) son un verdadero misterio. Ellos afirman que su autoridad proviene de Dios, pero no están de acuerdo con lo que Dios dice. Y babilonia es una buena descripción de esto porque esa palabra viene de la palabra “babel” que significa “confusión”, algo que no es claro, que es confuso como resultado de mezclar muchas voces. Y la propia iglesia católica afirma que su enseñanza más importante, la doctrina de la trinidad, no tiene fundamento en la Biblia, pero es un “misterio que fue dado a esa iglesia, algo que no se puede comprender del todo”.

Y hay dos razones para esa referencia a Babilonia. La primera es debido a algo que comenzó poco después del diluvio, en los días de Noé, cuando la falsa religión comenzó a surgir nuevamente en diferentes ciudades, entre ellas la ciudad de Babel. Los habitantes de esa ciudad decidieron construir una torre que se elevara hasta los cielos. Sus esfuerzos estaban fundamentados en ideas de las falsas religiones. La corrupción y el orgullo aumentaban a un ritmo tan rápido en la mente de los que vivían en esa ciudad que Dios tuvo que intervenir para evitar que la mente de las personas se corrompiese del todo una vez más.

En ese entonces, luego después del diluvio, todos hablaban el mismo idioma. Y Dios puso freno a sus malévolas aspiraciones confundiendo a las personas con diferentes idiomas. Este es el origen de los diferentes idiomas que existen en el mundo hoy. Dios cambió la mente de las personas de tal manera que de un momento a otro ellas podían entender y hablar en otro idioma. Y entonces las personas ya no podían entender unas a otras. Una persona solo podía entenderse con los que hablaban el mismo idioma que ella.

Imagínese que todo el mundo hablase inglés y un día, de repente, un grupo de personas solo pudiese hablar en francés, otro grupo solo en japonés, mientras que otros solo pudiesen hablar en ruso. Y entonces las personas tuviesen que dividirse en grupos y juntarse con otros que hablasen el mismo idioma que ellas. Y quizá sea difícil imaginar algo así, pero esto fue exactamente lo que sucedió. Personas que hablaban el mismo idioma un día empezaron a hablar en idiomas completamente diferentes al día siguiente. Y era como si ellas siempre hubiesen sabido el nuevo idioma en el que estaban hablando. Ellas ya no comprendían, ya ni siquiera se acordaban del idioma que habían hablado antes.

Esa ciudad pasó a llamarse Babel. Y el nombre Babilonia, que es el nombre de uno de los primeros imperios proféticos que gobernaron el mundo, tiene el mismo significado. Ese imperio profético es representado por la cabeza de oro de la estatua que el rey Nabucodonosor vio en sus sueños.

Babel y Babilonia significan “confusión”. Ese nombre es sinónimo de lo que representan las religiones y los gobiernos de este mundo. Los sistemas creados por el hombre que solo crean confusión, desorden, división y guerras. Y esto es todo lo opuesto al camino de vida de Dios, que produce unidad, sano juicio y paz verdadera.

Y si usted comprende el significado de la expresión “misterio, la gran Babilonia” en toda su extensión, entonces usted puede entender cual es realmente el origen de las falsas religiones. Porque después del diluvio fue en la ciudad de Babel donde comenzaron a surgir ideas y costumbres religiosos que son falsos. Y esas ideas fueron ganando popularidad entre las personas y ellas comenzaron a adorar a los falsos dioses que surgieron de esas mismas ideas, cuando todos todavía hablaban un mismo idioma en Babilonia.

Después de que las personas se dividieron en grupos que hablaban el mismo idioma ellas se marcharon a vivir en otras regiones. Y los nombres de esos falsos dioses eran diferentes en cada idioma. Cada grupo comenzó a desarrollar su propia cultura, que no era muy diferente de la cultura de otros grupos en lo que se refiera a las creencias y costumbres religiosos. Esto es algo que se puede ver en su manera de adorar al sol, la luna y los planetas, y los llamados dioses de la fertilidad.

La adoración a Tamuz, Ishtar, Astarté, Diana, Zeus, Artemisa, Ra, Aton, Apolo y tantos otros falsos dioses tiene su origen en Babilonia. Las ideas que comenzaron a surgir en la ciudad de Babel se desarrollaron hasta convertirse en falsas religiones. Y más tarde, en el año 325 d.C., todas esas creencias y enseñanzas fueron agrupadas y organizadas en lo que ellos llaman de “cristianismo”. Así fue como surgió el falso cristianismo. Y por eso la Biblia se refiere a esa religión como “misterio, la gran Babilonia”.

Y en estos versículos también está escrito que esa mujer, esa iglesia, se había emborrachado con la sangre de los santos. La palabra “santos” era usada por los primeros apóstoles para referirse a los miembros de la Iglesia de Dios que vivían fielmente de acuerdo con el camino de vida de Dios. Esa palabra no se refiere a “los santos” que esa iglesia se ha inventado. Esa iglesia ha estado persiguiendo, ha encarcelado y ha matado a muchos del pueblo de Dios a lo largo del tiempo. Al fin y al cabo, esa iglesia ha sido fundada por el gobierno romano, el mismo gobierno que condenó al Hijo de Dios, Josué el Cristo, a morir clavado en un madero. Y ese mismo gobierno también mandó decapitar a Juan el Bautista.

Sabemos por lo que está escrito en la Biblia y por las cosas que nos fueron transmitidas, que todos los primeros apóstoles fueron encarcelados. Algunos de ellos varias veces. También sabemos que casi todos ellos fueron muertos por orden del gobierno romano. Está escrito en la Biblia que Herodes mató a espada a Santiago, el hermano de Juan. Y, de acuerdo con los relatos históricos, el apóstol Juan, que fue encarcelado en la isla de Patmos, fue probablemente el único de ellos que no murió a manos del gobierno romano.

Pablo, el apóstol que fue enviado a predicar a los gentiles, fue golpeado, apedreado, encarcelado y estuvo bajo arresto domiciliario en Roma durante un largo período de tiempo antes de que ellos finalmente lo matasen. Y la verdad es que desde entonces el mensaje que los apóstoles y ministros de la Iglesia de Dios han predicado ha sido odiado por las personas. Y, como resultado de esto, muchos otros líderes de la Iglesia de Dios han sido encarcelados y/o muertos.


Satanás y el pozo sin fondo

Juan describió esa mujer montada sobre la bestia y el ángel entonces le dijo que iba a explicarle el misterio de esa mujer y de la bestia de siete cabezas y diez cuernos en la que ella va montada.

La bestia que has visto era y no es, y está a punto de subir del abismo, pero va rumbo a la perdición. Los habitantes de la tierra, cuyos nombres, desde la creación del mundo, no han sido escritos en el libro de la vida, se asombrarán al ver a la bestia que era y no es y será. (Apocalipsis 17:8)

A medida que usted sigue leyendo esa narración queda evidente que esa bestia representa a Satanás. Él es quien lleva a esa mujer sobre sus lomos, es quien sostiene, quien da ​​poder a esta iglesia. Él es quien está detrás de todos los resurgimientos del profetizado Imperio Europeo. De hecho, en la Biblia Satanás es descrito a veces como una bestia, otras veces como un dragón y también como esa bestia escarlata que tiene siete cabezas, que representan los siete resurgimientos del Imperio Europeo. Esos resurgimientos tendrían lugar dentro de un período de tiempo que abarca más de 1.450 años, contando a partir del primer resurgimiento, que tuvo lugar bajo el gobierno del Emperador Justiniano.

Parte de lo que está escrito sobre esa bestia que saldrá del abismo está escrito en forma de acertijo. Como he mencionado antes, esta bestia lleva a es mujer – la iglesia de Roma - sobre sus lomos. Y es esta misma bestia quien da a esa mujer aún más poder y más protagonismo. Esta bestia es Satanás. Pero la palabra “bestia” también describe el papel de las naciones con las que él trabaja muy específicamente para sostener y enaltecer a esa iglesia, para dar a esa iglesia más poder y prominencia durante cada uno de los resurgimientos del profetizado Imperio Europeo.

El propósito de cada uno de estos resurgimientos es la guerra. Y durante 1.260 anos esa iglesia siempre estuvo involucrada, de una manera u otra, en esos resurgimientos. Hasta la caída de Napoleón. Porque esto fue el comienzo del fin del poder y de la influencia de la iglesia católica sobre el Imperio Europeo. Y desde entonces el poder y la influencia de la Iglesia Católica ha ido menguando cada vez más, como se puede ver hoy. Y esto está llevando a ese cristianismo que fue instituido en el año 325 d.C. a su destruición, que, como fue profetizado, tendría lugar en el tiempo del fin.

La participación de esa iglesia en esos resurgimientos y en esas guerras es casi siempre entre bambalinas, en secreto. No obstante, esto es lo que significa la descripción de la bestia que sostiene a esa iglesia, porque en realidad el poder de esa iglesia viene de Satanás y de los demonios.

La Biblia dice que Satanás será encadenado y confinado en un “pozo sin fondo” y que más tarde él será puesto en libertad, pero solo por un corto período de tiempo. Aunque debido a la forma en que esto está escrito esto se parece más a un acertijo, la Biblia es muy específica en lo que se refiere a cuándo esto tendrá lugar.

Ese “pozo sin fondo” es mencionado por primera en la Biblia en la descripción de los acontecimientos anunciados por la Quinta Trompeta. Está escrito que saldría humo de ese pozo, simbólicamente, cuando se cumpliese la fase espiritual de los acontecimientos anunciados por la Quinta Trompeta. (Apocalipsis 9:1-3). Esa fase ya se cumplió. Y daré más detalles sobre esto en la segunda parte de este capítulo, cuando hable sobre la destrucción del tiempo del fin que sobrevino al verdadero cristianismo: la Iglesia de Dios. Esta destrucción comenzó el 17 de diciembre de 1994, cuando Dios permitió a Satanás perseguir a Su Iglesia. Y ese período de tiempo ya pasó.

Pero la fase física de la Quinta Trompeta, que es cuando Satanás será liberado del abismo, no se ha cumplido todavía. El humo que sube de ese pozo representa el hecho de que Satanás será liberado nuevamente. Lo que significa que ya no le serán impuestas restricciones y que él podrá ejercer libremente su influencia sobre diez naciones europeas y llevarlas a una última gran guerra, una guerra nuclear, la Tercera Guerra Mundial.

Dios ha permitido que Satanás influya en los diversos resurgimientos del Imperio Europeo. Cuando un resurgimiento llega al fin, entonces Dios restringe a Satanás nuevamente y no le permite ejercer su poder e influencia para llevar a las naciones a la guerra. Hasta que llega el momento y Dios le permite hacer esto nuevamente. Dios permitirá a Satanás ascender de ese pozo nuevamente, le va a liberar de su restricción por última vez para que él lleve a esas diez naciones europeas a unirse con el propósito de hacer la guerra. Cuando esas naciones puedan unirse como una sola potencia, sin la carga del resto de la actual Unión Europea, esto las llevará a la Tercera Guerra Mundial.

Es muy importante que usted comprenda la importancia de lo que voy a decir en el siguiente párrafo.

Mismo que Dios no estuviera en el control de todo esto y Satanás no fuese liberado cuando él será liberado, esas naciones empezarían una guerra de una manera u otra. Esto es especialmente cierto en este tiempo del fin. Pase lo que pase este mundo camina con pasos de gigante en dirección a la Tercera Guerra Mundial. Y esto es el resultado del hecho de que las personas y las naciones se han vuelto tan corruptas en su manera de pensar. Si Dios no interviene exactamente de la manera en que Él hará, esa guerra va a durar mucho más tiempo y traerá mucho más angustia y sufrimiento, porque entonces ese será un horrible y prolongado conflicto. Dios no solo va a intervenir para evitar que los seres humanos destruyan a sí mismos, pero Él también va a acortar la duración de todo esto, para reducir la intensidad y la duración del sufrimiento de los seres humanos.

Abismo, o pozo sin fondo, es simplemente una descripción física, que proviene de dos palabras. Una de ellas es abyss” (que también puede ser traducido como sin fondo) y la otra palabra significa “pozo”, y es usada a menudo para describir una cisterna, un lugar preparado para retener agua.

Es muy difícil describir algo que es de naturaleza espiritual usando ejemplos de cosas físicas. Ese lugar del que se habla aquí es simplemente una condición espiritual especialmente preparado para limitar el poder de Satanás. Se trata de una condición o de un estado en el que gran parte de su poder es limitado; principalmente su poder para llevar a las naciones a la guerra. Esto es algo que Dios no permite que Satanás haga hasta que sea el momento para ello. Esas cosas pueden resultar difíciles de entender, pero Dios es quien controla cuando todo esto tiene lugar, para cumplir de la manera más eficaz Su propósito de liberar a los seres humanos.

En los períodos de tiempo que Dios impide a Satanás usar todo su poder eso no significa que su poder le sea completamente quitado. Mismo estando condicionado por este abismo espiritual, Satanás todavía puede transmitir ciertas actitudes a la mente humana y puede ejercer influencia sobre los seres humanos. Pero en un determinado momento, al final de la presente era, justo antes de que el Reino de Dios sea establecido sobre las naciones y empiece en Milenio, Satanás será confinado. Y durante 1.000 años él no podrá ejercer NINGÚN PODER, ninguna influencia sobre los seres humanos.

Satanás subirá del abismo, del pozo sin fondo, de esta condición de restricción espiritual, hacia el final del séptimo y último resurgimiento, que comenzó a tomar forma en la década de 1950. Este último resurgimiento es representado por los diez cuernos. Esto es mencionado nuevamente unos versículos más adelante. Satanás podrá ejercer un mayor poder sobre esos diez cuernos (esas diez naciones) haciendo con que sus líderes se unan y empiecen una guerra. Y aunque Satanás pueda esforzarse al máximo ejerciendo toda su influencia sobre estos gobernantes para que ellos hagan lo que él quiere, ellos son los que deciden si van a ceder o no a esa influencia.


“La bestia que era y no es”

Cuando usted lee ese versículo en Apocalipsis 17, que habla sobre la bestia, Satanás, que antes era, pero que ya no es, esto parece un acertijo. La única forma de comprender esto es si usted entiende que durante todos esos resurgimientos Dios no limita el poder de Satanás.

La expresión “la bestia que antes era” puede referirse a cualquier período de tiempo cuando Satanás estuvo activo durante uno de los resurgimientos en Europa, cuando él no estaba siendo restringido en ese abismo espiritual. Pero ese versículo aquí se refiere a un período de tiempo muy específico. Esto se refiere a la última vez que él no estuvo restringido. Esto fue cuando él estaba trabajando con Alemania e Italia ejerciendo directamente su poder e influencia sobre Hitler y Mussolini.

Pero cuando la Segunda Guerra Mundial terminó, Satanás fue restringido nuevamente. Y esa es su condición actual. Él ahora no está ejerciendo todo su poder porque está restringido en ese abismo espiritual, una condición en la que él ha estado en los últimos casi 75 años.

Pero mismo estando restringido espiritualmente, Satanás puede ejercer su influencia y poder, transmitiendo su actitud espiritual a la mente de las personas, para manipular y engañar a las personas. Dios no siempre le permite usar todo su poder e influencia como “el Destructor”, para destruir y causar la guerra. Satanás tiene muchos nombres, que describen sus malas acciones. Uno de esos nombres mencionados en la Biblia es Apolion, que significa “el Destructor”. Y en ese versículo nos es dicho lo que le va a pasar después que termine este período de tiempo:

La bestia que has visto era y no es, y está a punto de subir del abismo, pero va rumbo a la perdición. (Apocalipsis 17:8)

Aquí se describe el momento cuando Satanás saldrá de ese abismo espiritual, de ese lugar de restricción. Será entonces cuando él va a ejercer su influencia para acelerar todo ese proceso e incitar a las naciones a una inevitable Tercera Guerra Mundial. Y aquí dice que cuando esto termine él va rumbo a la perdición.

La palabra “perdición” es usada de muchas maneras y puede significar “destrucción, perecer, morir”. La manera como esa palabra es usada en ese versículo tiene un doble propósito. Porque cuando Satanás sea liberado él llevará a las personas y a las naciones a la Tercera Guerra Mundial, una guerra nuclear a gran escala. Sus acciones conducen a una gran destrucción y a la muerte de millones de personas. Pero esta será la última vez que Satanás podrá provocar una guerra y causar una destrucción tan grande. Aunque más adelante él volverá a intentarlo una vez más.

Las naciones de Europa harán exactamente lo que Satanás quiere que ellas hagan y se involucrarán en una gran guerra nuclear con otros países. Pero lo lejos que Europa va a llegar con todo esto depende de su propia elección.

La Tercera Guerra Mundial es realmente la guerra que pondrá fin a todas las guerras. Dios nunca permitirá que haya otra guerra después que Él ponga fin al autogobierno de los seres humanos en la tierra. Dios va a intervenir y poner fin a la Tercera Guerra Mundial, y entonces Él establecerá la paz en la tierra; y la paz reinará sobre los seres humanos durante los siguientes 1.000 años. Y nunca más Dios permitirá que haya guerras. Esto es parte de las “buenas nuevas” (del evangelio) del Reino de Dios, porque cuando el gobierno de Dios sea establecido en la tierra esto traerá la paz.

Y al mismo tiempo que Satanás alborota las cosas y provoca una última gran guerra, que causará mucha destrucción y muerte, él camina a pasos largos hacia su propia destrucción y muerte. Al provocar esa última guerra él se dirige hacia su propia perdición, aunque eso solo se ejecutará mucho más tarde.


“La bestia que era y no es y será”

La última parte de ese mismo versículo también ha sido escrita en forma de acertijo, pero es diferente a lo que está escrito en la primera parte del versículo. Fíjese:

La bestia que has visto era y no es, y está a punto de subir del abismo, pero va rumbo a la perdición. Los habitantes de la tierra, cuyos nombres, desde la creación del mundo, no han sido escritos en el libro de la vida, se asombrarán al ver a la bestia que era y no es y será. (Apocalipsis 17:8)

Primero es necesario que usted entienda quiénes son las personas cuyos nombres ya han sido escritos en el libro de la vida. Esto no tiene nada que ver con la predestinación, como algunos enseñan. Como he dicho antes, aquellos cuyos nombres han sido escritos en el libro de la vida son las personas con las que Dios ha trabajado en diferentes épocas durante los últimos 6.000 años. Ellos son los que vendrán con Cristo para gobernar la tierra. Ellos han sido llamados para ese propósito desde la fundación del mundo, cuando Dios colocó a los seres humanos en la tierra.

Ellos son los que serán resucitados a la vida espiritual cuando Cristo regrese. Ellos entonces serán seres compuestos de esencia espiritual, pero podrán manifestarse en forma física, como Cristo hizo después que él fue resucitado. El plan de Dios desde el principio, antes de la fundación del mundo, es que habrá 144.000 individuos que regresarán con Cristo cuando él venga. Ellos son aquellos a quienes Dios ha “elegido” a lo largo de 6.000 años para ser parte de la primera resurrección, para ser resucitados a la vida espiritual cuando Cristo regrese. Ellos son aquellos cuyos nombres están escritos en el libro de la vida hasta este momento. Muchos de ellos son mencionados por sus nombres en la Biblia, pero la mayoría de ellos no.

Los que son mencionados en ese versículo como aquellos cuyos nombres no han sido escritos en el libro de la vida, son aquellos que van a vivir en el Milenio bajo el gobierno del Reino de Dios. Ellos sabrán (verán) lo que Satanás ha hecho contra Dios y contra los seres humanos durante esos 6.000 años. Ellos quedarán asombrados entonces y sabrán que ese ser y los demonios ya no podrán estar entre los seres humanos para engañarles y hacerles daño.

Todos los que van a vivir durante el Milenio sabrán que Satanás era la bestia que “antes era”, pero ahora “ya no es”, porque él ya no estará entre los seres humanos. Todos ellos también entenderán (verán) que Satanás, la bestia, todavía existe, “todavía es”. Las personas que van a vivir durante esos 1.000 años conocerán y creerán la verdad que está escrita en la Biblia, que ese ser será sacado de entre los seres humanos, pero será liberado por poco tiempo cuando termine el Milenio.

Ese versículo sobre la bestia, sobre Satanás, es profético. Primero ese versículo habla sobre el séptimo y último resurgimiento y luego habla sobre el período de tiempo que sigue a esto, cuando Satanás será encerrado en un pozo sin fondo (en un abismo espiritual) que permanecerá sellado durante 1.000 años. Esos 1.000 años empezarán luego después que Cristo regrese.


El fin del misterio de Babilonia

El título del presente capítulo es La destrucción del tiempo del fin en los dos cristianismos. El cristianismo que fue instaurado en el año 325 d.C. es descrito como “una mujer sentada sobre una bestia, en cuya frente llevaba escrito un nombre: misterio, la gran babilonia madre de las prostitutas y de las abominables idolatrías de la tierra.”

Cuando Cristo regrese con su ejército formado por 144.000 seres compuestos de espíritu Dios pondrá fin a este falso cristianismo. En Apocalipsis está escrito que entonces siete ángeles derramarán las siete copas de “la ira de Dios” sobre la tierra. esa será la sentencia de Dios, la destrucción completa de este sistema. A esto se refiere lo que he mencionado al principio de este capítulo sobre la destrucción de este sistema falso.

Uno de los siete ángeles que tenían las siete copas se me acercó y me dijo: “Ven, y te mostraré el castigo de la gran prostituta que está sentada sobre muchas aguas. Los reyes de la tierra cometieron adulterio con ella, y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su inmoralidad”. Luego el ángel me llevó en espíritu a un desierto. Allí vi a una mujer montada en una bestia escarlata. La bestia estaba cubierta de nombres de blasfemia contra Dios, y tenía siete cabezas y diez cuernos.” (Apocalipsis 17:1-3).

El juicio que vendrá sobre esa gran prostituta en el tiempo del fin resultará en su completa destrucción.

También me dijo [el ángel]: “Las aguas que has visto donde está sentada la prostituta son pueblos y multitudes, naciones y lenguas. Los diez cuernos que has visto, y la bestia, estos aborrecerán a la prostituta y la dejarán desolada y desnuda. Comerán sus carnes y la quemarán con fuego; porque Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar Su propósito, y que tengan un solo propósito, y que entreguen su reino a la bestia hasta que se cumplan las palabras de Dios. La mujer que has visto es la gran ciudad que tiene imperio sobre los reyes de la tierra”. (Apocalipsis 17:15-18).

Este sistema religioso falso que durante siglos ha tenido bajo su dominio a los gobernantes de este mundo y ha ejercido influencia en la vida de las personas será destruido cuando la Tercera Guerra Mundial llegue al fin. Dios permitirá que Satanás, la bestia, ejerza influencia sobre diez naciones europeas haciendo con que ellas se involucren en una guerra nuclear, pero Dios también pondrá en la mente de estos gobernantes la idea de volverse en contra de esta mujer, de esta iglesia falsa, debido a la influencia maligna de esta iglesia, sus consejos a las naciones para que empiecen guerras, y los catastróficos resultados de haber dado oídos a esos consejos. Estos gobernantes, a su vez, la desnudarán y la dejarán desolada, la quemarán completamente con fuego, la devorarán y la destruirán completamente.

En el siguiente capítulo de Apocalipsis Juan sigue describiendo la completa destrucción de Babilonia. Todo lo que quedará son los espíritus inmundos, o sea, Satanás y los demonios, que serán encarcelados. Su poder les será totalmente quitado una vez más, hasta justo después del Milenio, cuando ellos serán liberados por última vez.

Después de estas cosas vi a otro ángel que descendía del cielo y que tenía gran autoridad, y la tierra se iluminó con su gloria. Y proclamó con potente voz diciendo: “¡Ha caído, ha caído Babilonia la grande! Se ha convertido en habitación de demonios, refugio de todo espíritu inmundo, y refugio de toda ave inmunda y abominable. Porque todas las naciones han bebido el vino de la furia de su fornicación. Los reyes de la tierra han fornicado con ella, y los comerciantes de la tierra se han enriquecido con la abundancia de su inmoralidad”. (Apocalipsis 18:1-3)

En estos últimos capítulos de Apocalipsis queda claro que el sistema religioso de esta prostituta que monta la bestia y que lleva el nombre de Misterio de Babilonia será totalmente destruido.

Y un ángel poderoso tomó una piedra como una gran piedra de molino y la arrojó al mar diciendo: “Con semejante violencia será derribada Babilonia la grande ciudad, y jamás será hallada.” (Apocalipsis 18:21).

Justo antes que comience el reinado de 1.000 años de Cristo y los 144.000, Dios destruirá el falso cristianismo que surgió en el año 325 d.C. Entonces Cristo comenzará a reinar como Rey de reyes y establecerá el gobierno de Dios, el Reino de Dios, en la tierra. Y esto también significa que él establecerá la Iglesia de Dios como la única organización religiosa en toda la tierra. Todas las demás religiones y creencias serán destruidas y solo quedará la verdad de Dios.


DESTRUCCIÓN DEL TIEMPO DEL FIN EN EL CRISTIANISMO QUE COMENZÓ EN EL AÑO 31 d.C.

En el comienzo del presente capítulo he mencionado lo siguiente: “Algunos de esos catastróficos acontecimientos ya han tenido lugar en uno de esos grupos, el que fue fundado en el año 31 d.C. y que se llama la Iglesia de Dios.” Esta destrucción comenzó el 17 de diciembre de 1994. No obstante, las personas en el mundo no se dieron cuenta de que esos importantes acontecimientos proféticos se estaban cumpliendo ya que ellas desconocían la existencia de la Iglesia de Dios.

Los apocalípticos acontecimientos anunciados por los primeros cinco Sellos de Apocalipsis tienen que ver con la propia Iglesia de Dios. Estos acontecimientos y la cronología que ellos han seguido revelan cuando será la segunda venida de Cristo, cuando él va a regresar como el Mesías de toda la humanidad.

Las personas en el mundo no solo han ignorado la existencia de la Iglesia de Dios, sino que el cristianismo tradicional las ha mantenido engañadas en lo que se refiere a la verdad sobre el tiempo del fin. La mayoría de ellos ni siquiera habla sobre ese tema. Y los que sí hablan sobre esto usan interpretaciones erróneas de lo que Dios dice.

Una de las cosas más importantes que han sido erróneamente interpretadas sobre los acontecimientos del tiempo del fin es lo que está escrito en Apocalipsis sobre los primeros cuatro Sellos. Los Sellos de Apocalipsis describen catastróficos acontecimientos que tendrían lugar en el tiempo del fin. Y los primeros cuatro Sellos mencionan cuatro jinetes montado en caballos, cada caballo de un color, cada uno representando un tipo de destrucción diferente que tendría lugar en el tiempo del fin. Y debido a que ninguno de esos importantes acontecimientos, que ellos malinterpretan, está sucediendo en el mundo, las personas creen que la Tercera Guerra Mundial debe estar muy lejos todavía. Pero la realidad es que esta guerra puede comenzar en cualquier momento y las personas no están preparadas para esto.


Los Cuatro Jinetes de Apocalipsis

Algunas personas piensan que el tiempo del fin será como en los cuentos e historias basados en interpretaciones equivocadas que ellas oyen sobre los cuatro jinetes de Apocalipsis. Pero si usted sabe por qué las personas creen lo que ellas creen esto le ayudará a comprender mejor la verdad sobre cuándo estos proféticos acontecimientos tendrían lugar y que estos acontecimientos ya se han cumplido.

Algunas iglesias en el cristianismo tradicional enseñan sobre esos cuatro jinetes. Pero lo que pasa es que ellos piensan que estos jinetes simbolizan una gran tribulación a nivel físico. Ellos también piensan que esa gran tribulación llevará al mundo a la Tercera Guerra Mundial. ¡Pero esto no es verdad!

El significado de la palabra apocalipsis ha ido cambiando a lo largo de los siglos. Y esto se debe principalmente a la confusión creada por el cristianismo tradicional con sus muchas interpretaciones de lo que Juan escribió en el libro de Apocalipsis. La palabra apocalipsis apareció por primera vez tanto en el idioma griego como en latín. Cuando Juan escribió ese libro él usó la palabra griega apokalyptein, cuya definición es “descubrir, revelar y manifestar”.

Y casi 300 años después, cuando la iglesia católica encargó la traducción de la Biblia al latín, ellos comenzaron a usar la palabra apocalypsis, que en ese entonces todavía significaba revelación. Y mucho más tarde, durante el período de la historia del idioma inglés conocido como Inglés Medio, el significado de esa palabra ha cambiado a visión y también alucinación.

A mediados del siglo XIX, en los escritos sobre el significado de las cosas que fueron escritas en el libro de Apocalipsis, algunos comenzaron a usar la palabra apocalypsis para referirse a catastróficos acontecimientos proféticos y a la creencia en el inminente fin del mundo.

Durante las últimas décadas, el cristianismo tradicional se ha equivocado mucho y ha exagerado enormemente en la manera en que ellos usan esa palabra. Sus interpretaciones e ideas sobre esto los han llevado a dar a esa palabra definiciones que incluyen la completa destrucción el mundo, el fin del mundo, una catastrófica gran tribulación en la tierra antes de que comience la Tercera Guerra Mundial, teorías sobre un Armagedón (la última gran batalla que causará total destrucción del planeta Tierra) y muchas otras interpretaciones que no tienen ningún sentido.

Y debido a todas esas interpretaciones erróneas las personas han distorsionado y tergiversado completamente lo que anuncian los primeros cuatro Sellos de Apocalipsis y lo que esos cuatro jinetes representan.

En la descripción de los primeros cuatro Sellos de Apocalipsis lo que es mencionado sobre esos cuatro jinetes no tiene nada que ver con la definición moderna de la palabra apocalipsis como una gran destrucción física en el planeta Tierra. Todas esas ideas apocalípticas sobre el fin del mundo son falsas. ¡Todas esas afirmaciones y enseñanzas sobre Los Cuatro Jinetes de Apocalipsis no son nada más que montón de tonterías!

La verdad es que los acontecimientos anunciados por los cuatro primeros Sellos del Apocalipsis ya se han cumplido en la Iglesia de Dios. Esos acontecimientos proféticos serían el comienzo de una cuenta atrás muy específica para el tiempo del fin. Y muchos todavía están esperando por la revelación de los acontecimientos anunciados por los Cuatro Jinetes de Apocalipsis, pero lo que ellos no saben es que esos acontecimientos ya se han cumplido.

Para comprender de qué se tratan realmente los primeros cuatro Sellos de Apocalipsis usted necesita saber un poco sobre la Iglesia de Dios hoy. Una Iglesia sobre la que el mundo no sabe nada. Es importante saber lo que Dios ha estado haciendo a través de Su Iglesia en el tiempo del fin.


La Iglesia de Dios en el tiempo del fin

Durante casi 70 años, la Iglesia de Dios ha estado tratando de avisar a las personas de que estamos en el tiempo del fin, sobre el que está profetizado en la Biblia. También sobre una última guerra mundial: una guerra nuclear. Y, de acuerdo con la profecía, Europa volverá a jugar un importante papel en esa gran guerra. Como ya he mencionado antes justo después de la Segunda Guerra Mundial la Iglesia de Dios comenzó a avisar al mundo sobre esas cosas a través de Herbert Armstrong.

Durante más de una década la Iglesia de Dios ha estado intensificando esos avisos sobre el tiempo del fin, pero las personas siguen sin dar oídos a esto. Porque la naturaleza humana simplemente escarnece y rechaza lo que la Iglesia de Dios ha estado predicando desde que ella fue fundada en el año 31 d.C. Y como resultado de esto la verdad sobre los acontecimientos del tiempo del fin ha permanecido oculta para las personas.

Es difícil para la mente humana creer que exista una fuente de autoridad que sabe realmente cuál es la voluntad de Dios y cual es el propósito de Dios para la humanidad. Es difícil para una persona creer que la verdadera Iglesia de Dios ha permanecido pequeña a lo largo de los siglos, mientras que otras organizaciones que se dicen cristianas han crecido muchísimo. La tendencia de la naturaleza humana es creer que cuanto más grande es una iglesia, mayor es la probabilidad de que Dios esté obrando a través de ella.

Y algo que es aun más difícil para la mente humana es creer que más de dos mil millones de personas hayan sido engañadas por el cristianismo tradicional. Sin embargo, esto es lo que ha sucedido a lo largo de los siglos. Y esto se aplica tanto al cristianismo tradicional como a cualquier otra religión que adora a diferentes dioses. Todos esos miles de millones de seguidores de esas religiones están engañados.

En el presente libro yo he presentado pruebas suficientes de lo que es verdadero y lo que es falso con respecto a muchas enseñanzas y doctrinas sobre Dios y Cristo. Usted puede identificar a la Iglesia de Dios por medio de la verdad que ella enseña. No hay ninguna otra organización religiosa en este mundo que enseñe las verdades que he mencionado en el presente libro hasta ahora.

Pero también es necesario mencionar que la Iglesia de Dios aún no sabe toda la verdad. Esto se debe al hecho de que Dios ha ido revelando Su verdad poco a poco, de manera progresiva, durante los últimos 6.000 años. Y será solo después de que Cristo regrese de que la Iglesia de Dios recibirá toda la verdad.

A lo largo de los siglos, la Iglesia de Dios ha tenido que luchar para sobrevivir. Y con el tiempo ella fue se tornando cada vez más débil y el número de sus miembros ha ido disminuyendo hasta que la Iglesia de Dios casi desapareciera. Y llegado a ese punto, en la década de 1930, Dios levantó a un apóstol, Herbert Armstrong, a través del cual Él comenzó a restaurar la verdad en Su Iglesia.

Alrededor del año 90 d.C., Dios comenzó a revelar a Juan profecías sobre las siete eras por las que pasarían Su Iglesia hasta el tiempo del fin. Cuando llegó la quinta era, la Era de Sardis, a finales de la década de 1920, la Iglesia de Dios casi se había extinguido. Exactamente como Dios dijo que sucedería. Dios entonces puso fin a la Era de Sardis y levantó a Herbert Armstrong para restaurar la verdad en Su Iglesia en la era conocida como la Era de Filadelfia.

Dios dio a Su apóstol la tarea de restaurar la verdad a Su Iglesia y también le confió una misión que él debía cumplir antes que comenzara el tiempo del fin. Herbert Armstrong solía hablar a menudo de esa misión, ya que Dios le había revelado que esa era la misión que él debía cumplir.

Y este evangelio [las buenas nuevas] del reino será predicado [proclamado] en todo el mundo para testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin. (Mateo 24:14).

Ya he mencionado en el presente libro todo lo que Herbert Armstrong hizo para proclamar las buenas nuevas del Reino de Dios que vendrá para gobernar este mundo cuando Cristo regrese como Rey de reyes. La publicación a nivel mundial de la revista La Pura Verdad, los programas de radio y el programa de televisión El Mundo de Mañana, que eran transmitidos a todo el mundo, y también las reuniones que él mantuvo con numerosos líderes mundiales forman parte del cumplimiento de esa misión.

De hecho, esto fue un “testimonio a las naciones” del mundo de que el tiempo del fin estba llegando y que pronto el Reino de Dios sería establecido en la tierra. Pero pueblos y naciones de todo el mundo rechazaron esas buenas nuevas. Y esto también es un testimonio contra los seres humanos por negarse a dar oídos a Dios. Herbert Armstrong murió en enero de 1986, después de concluir su misión. Y los acontecimientos del tiempo del fin comenzaron a tener lugar cuando empezó la séptima y última era de la Iglesia de Dios, la Era de Laodicea.

Cuando la Era de Laodicea estaba llegando al fin los más importantes acontecimientos del tiempo del fin se cumplieron en la Iglesia de Dios. Acontecimientos que son anunciados por los primeros cuatro Sellos de Apocalipsis y que comúnmente se conocen como Los Cuatro Jinetes de Apocalipsis. Esos acontecimientos son proféticos y tienen que ver con la Iglesia de Dios. No se trata de acontecimientos físicos del tiempo del fin que tendrían lugar en el mundo.


El tiempo profético para la segunda venida de Cristo

Durante la Era de Filadelfia, Dios dio a Su apóstol, Herbert Armstrong, una clave profética muy específica sobre los primeros cuatro Sellos de Apocalipsis. Dios dio a Herbert Armstrong la comprensión de que la profecía del Monte de los Olivos mencionada en Mateo 24 es la clave para comprender lo que anuncian esos cuatro Sellos. Pero lo que Herbert Armstrong no pudo entender es esos acontecimientos del tiempo del fin no se cumplirían a nivel físico.

En la última noche de su vida, la noche del Pesaj del año 31 d.C., Cristo dijo la profecía del Monte de los Olivos a sus discípulos cuando ellos estaban en el Monte de los Olivos. Y aunque Dios dio esa clave a Herbert Armstrong, Dios no reveló a él todo el significado de esa profecía. Dios tampoco le permitió usar esa “clave” porque el momento para abrir los Sellos de Apocalipsis no había llegado todavía. Dios no le permitió entender que todo esto es profético y se refiere a la propia Iglesia de Dios. Y por eso Herbert Armstrong pensaba - erróneamente - que el Primer Sello se refiere a algo que iba a tener lugar a nivel físico entre los seguidores del cristianismo tradicional.

Lo que está escrito en Mateo 24 y en las demás narraciones sobre esa profecía del Monte de los Olivos es paralelo a lo que está escrito en Apocalipsis 6 sobre los cuatro primeros Sellos. Y fue solo cuando el Primer Sello fue abierto que la Iglesia de Dios pudo entender que lo que anuncian esos cuatro primeros Sellos no se trata de algo físico. Y por eso no es de extrañar que las personas en el mundo piensen que esas cosas tienen que ver con una gran tribulación física que tendrá lugar en la tierra.

Como he dicho antes, a menudo las personas se refieren a esos cuatro primeros Sellos como los Cuatro Jinetes de Apocalipsis porque ellas piensan que esos Sellos anuncian acontecimientos “apocalípticos” que causarán una enorme destrucción en la tierra, a nivel físico. Y por supuesto que habrá mucha destrucción en este mundo - una destrucción de proporciones apocalípticas - cuando los acontecimientos anunciados por las cuatro primeras Trompetas del Séptimo Sello comiencen a tener lugar y los Estados Unidos sean totalmente destruidos. No obstante, los cuatro primeros Sellos anuncian una enorme destrucción que tuvo lugar en la propia Iglesia de Dios. Una destruición apocalíptica, pero de naturaleza espiritual.

En una ocasión Josué, el Cristo, estaba con los discípulos en los alrededores del templo y él les profetizó lo que iba a pasar con la Iglesia de Dios en el tiempo del fin. Y entonces ellos empezaron a hacerle preguntas sobre esto, como podemos leer en los versículos que voy a citar a continuación:

Josué salió del templo y, mientras caminaba, se le acercaron sus discípulos y le mostraron los edificios del templo. Pero él les dijo: “¿Veis todo esto? Os aseguro que no quedará piedra sobre piedra, pues todo será derribado”. (Mateo 24:1-2).

Pero los discípulos pensaron que Josué, el Cristo, se refería a algo de naturaleza física. Esa es la respuesta natural de la mente humana a las enseñanzas de Josué, el Cristo. Por naturaleza los seres humanos solo podemos entender el mundo físico que nos rodea. No podemos comprender lo que es de naturaleza espiritual.

Podemos encontrar muchos ejemplos de esto en el libro de Juan. En Juan 3 está escrito que Josué, el Cristo, dijo a Nicodemo, un importante líder de los judíos, que es necesario “nacer de nuevo”. Y Josué, el Cristo, se refería a nacer del espíritu, pero Nicodemo no pudo comprender esto y le preguntó cómo un hombre podía volver a nacer ya siendo viejo. Nicodemo sabía que no podía volver al útero de su madre y nacer nuevamente.

También los seguidores del cristianismo tradicional interpretan esto de la manera equivocada y creen que nacer de nuevo es una especie de “experiencia espiritual” que una persona puede tener mientras está todavía en este cuerpo físico. Pero Josué se refería a un cambio que debe tener lugar en los seres humanos. Y ese cambio es una parte muy importante del propósito de Dios para los seres humanos. Tenemos la oportunidad de nacer como seres compuestos de espíritu y tener la vida eterna en la Familia de Dios.

Y en Juan 4 podemos leer sobre una conversación que Josué tuvo con una mujer samaritana. Josué estaba sentado junto a un pozo y esa mujer fue al pozo para sacar agua. Josué entonces le dijo que si ella bebiese del agua de ese pozo ella volvería a tener sed, pero él podía darle agua viva, y que si ella bebía de esa agua ella jamás volvería a tener sed. Ella entonces le pidió que le diese de esa agua para no tener que volver al pozo todos los días para sacar agua para beber. Ella no pudo entender que él no estaba hablando de agua física, sino del agua espiritual, de la Palabra de Dios.

En Juan 6 Josué habla sobre los nuevos símbolos del Pesaj. Y más tarde Pablo explicó esto en 1 Corintios 11:23. Josué dijo a sus discípulos que ellos tenían que comer de su carne y beber de su sangre. En Juan 6:66 está escrito que después de eso muchos de sus discípulos (no los doce) dejaron de seguirlo porque quedaron escandalizados con lo que él les había dicho. El pueblo judío siempre ha obedecido las leyes sobre los alimentos puros e impuros. Ellos sabían muy bien que comer carne humana y beber sangre humana era una evidente e innegable transgresión de la ley de Dios.

Pero Josué no estaba hablando de algo físico. Él no les estaba diciendo que ellos tenían que hacer esto literalmente. Él estaba preparando los discípulos para algo que él haría más tarde al instituir los nuevos símbolos del Pesaj. El vino, símbolo de su sangre, y el pan, símbolo de su carne, de su vida física que él iba a entregar por los pecados de toda la humanidad como el sacrificio del Pesaj.

En el libro de Juan hay más cosas que deben ser interpretadas espiritualmente y que las personas en cambio han interpretado como algo físico. Como lo que Josué, el Cristo, dijo a los sus discípulos sobre las piedras del templo. Él les dijo que no quedarían una sobre otra porque todas serían derribadas. Esto no debe ser interpretado como algo físico, sino como algo que tendría lugar a nivel espiritual. Aunque en el año 70 d.C. el templo físico fue destruido por los romanos durante la primera era de la Iglesia de Dios, la Era de Éfeso, Cristo no les estaba hablando sobre esto. Esta profecía se cumpliría en la Iglesia de Dios en el futuro, en el tiempo del fin. Cristo se refiere a las piedras del Templo espiritual de Dios, a la Iglesia de Dios.

Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino juntamente ciudadanos con los santos, y miembros de la familia de Dios. [El Templo espiritual de Dios]. Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo Josué, el Cristo, la principal piedra angular. En él todo el edificio, bien armado, va creciendo hasta llegar a ser un templo santo en el SEÑOR. En él también vosotros sois edificados juntamente para ser morada de Dios por Su espíritu. (Efesios 2:19-22).

Aquí Pablo describe a aquellos a los que Dios ha llamado a Su Iglesia como parte de un Templo espiritual, un Templo santo en el SEÑOR. Y el apóstol Pedro describe esto de manera similar.

Cristo es la piedra viva, rechazada por los seres humanos, pero escogida y preciosa ante Dios. Al acercaros a él, también vosotros sois como piedras vivas, con las cuales se está edificando una casa espiritual. De este modo llegáis a ser un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales que agradan a Dios por medio Josué, el Cristo. (1 Pedro 2:4-5).

Los miembros de la Iglesia de Dios son descritos como “piedras vivas” (espiritualmente) con las cuales Dios está construyendo una casa espiritual. Y esa casa espiritual es el Templo de Dios.

En la profecía del Monte de los Olivos, cuando Cristo explicó que las piedras del templo serían derribadas, él estaba hablando de algo que iba a pasar en la Iglesia de Dios en el futuro. Él estaba hablando de la misma manera que cuando él les dijo a los judíos: “Destruyan este templo y en tres días yo lo levantaré nuevamente”. En esa ocasión, él estaba hablando de sí mismo, estaba prediciendo su muerte y también su resurrección. Porque Dios iba a resucitar a Cristo después de que él estuviera muerto y en la tumba durante tres días y tres noches.

Cristo dijo a los discípulos que no quedaría piedra sobre piedra en el templo y ellos le hicieron algunas preguntas porque querían saber más sobre esto.

Estando él sentado en el Monte de los Olivos, sus discípulos se acercaron a él aparte y le dijeron: “Dinos, ¿cuándo sucederán estas cosas? ¿Y qué señal habrá de tu venida y del fin del mundo [de la presente era]?” (Mateo 24:3).

¿Entiende usted el contexto de esta profecía? Esta profecía no solamente habla sobre lo que iba a pasar en la Iglesia de Dios, sino que también deja claro cuándo estas cosas tendrían lugar. Los discípulos preguntaron a Josué cuándo las piedras del templo serían derribadas. Y por su pregunta queda claro que ellos sabían que Josué estaba hablando de su venida en su Reino y el tiempo del fin. Esta profecía habla de lo que sucedería en la Iglesia de Dios en el tiempo del fin, justo antes de que Josué, el Cristo, regrese para establecer el Reino de Dios en la tierra.

En otros pasajes de la Biblia queda claro que los discípulos querían saber cuándo el Reino de Dios sería establecido. Y lo que ellos no sabían es que esto no tendría lugar en su tiempo. Pero ellos creían que sería pronto. Porque entonces ellos todavía no entendían las cosas que Josué les había estado diciendo sobre su muerte. Ellos no sabían que Josué sería muerto. Y en el libro de Marcos ese mismo episodio es narrado, pero de una manera un poco diferente.

Dinos, ¿cuándo sucederá eso? ¿Y cuál será la señal de que todo está a punto de cumplirse? (Marcos 13:4).

Josué estaba hablando a sus discípulos sobre cuando él vendría como Rey de reyes en el Reino de Dios, y también sobre la señal de que esas cosas iban a cumplirse. La señal que él daría tendría que ver con la Iglesia. Se trata de acontecimientos y señales que sucederían en la Iglesia de Dios y no en el mundo. El siguiente versículo deja esto muy claro.

Y este evangelio [las buenas nuevas] del reino será predicado en todo el mundo como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin. (Mateo 24:14).

Aquí Cristo comienza a revelar más a los discípulos sobre las cosas que se cumplirían en la Iglesia de Dios a lo largo del tiempo. Y entonces él empieza a centrarse en los acontecimientos que conducirían al tiempo del fin y les revela un acontecimiento muy específico. Este acontecimiento se cumplió cuando Herbert Armstrong, el apóstol de Dios, cumplió con la misión que Dios le había dado. Él logró cumplir esa tarea a través de la gran labor que él realizó difundiendo el evangelio en todo el mundo a través de revistas, panfletos, programas de radio y televisión, y visitando a los gobernantes de este mundo. Y el evangelio del Reino fue predicado a todo el mundo, y después de esto se cumplió lo que Cristo dijo: llegó el tiempo del fin.

Después de la muerte de Herbert Armstrong comenzó la última era de la Iglesia de Dios, la Era de Laodicea. En la profecía del Monte de los Olivos Cristo dice más cosas sobre la señal de su venida, algo que sucedió tal como él dijo que sucedería. Cuando los discípulos le preguntaron cuál sería la señal de su venida él les dijo exactamente cuándo empezaría la cuenta atrás para el tiempo del fin. Cristo dijo que el fin vendría después que el evangelio fuese predicado a todo el mundo. Y después de decir esto él les dijo cuál sería esa señal, o sea los acontecimientos del tiempo del fin que conducirían a su segunda venida.

Así que, cuando veáis en el lugar sagrado la abominación desoladora de la que habló el profeta Daniel (el que lea, entienda), los que estén en Judea huyan a los montes.” (Mateo 24:15-16).

Cristo les estaba revelando lo que sucedería a nivel espiritual usando para esto el ejemplo de lo que había ocurrido antes en el templo físico. Todos ellos sabían sobre la abominación que había tenido lugar en el templo en el año 168 a.C., cuando Antíoco IV Epífanes profanó el templo erigiendo una estatua del dios Zeus y ofreciéndole un cerdo sobre el altar del templo.

Esa narración en Daniel tiene un doble cumplimiento profético. Esto se cumplió primero a nivel físico en el año 168 a. C. Pero Cristo les dijo que esto también habría de cumplirse a nivel espiritual, cuando una abominación desoladora tuviese lugar en la Iglesia de Dios, en el Templo espiritual de Dios.

Y esto sería tan devastador para el pueblo de Dios (referido aquí como Judea, Judá espiritual, la Iglesia) que Cristo les dijo que ellos huyesen a las montañas. Y voy a explicar esto con más detalle más adelante, pero Cristo aquí se refiere a una época cuando la Iglesia sería dispersada. Proféticamente un monte o una montaña simboliza a los gobiernos. Cristo aquí habla sobre lo que pasaría en la Iglesia de Dios cuando hasta el ministerio, el gobierno de la Iglesia se dispersara.

Algunos leen esas profecías sobre la señal de la venida de Cristo y piensan que esta abominación desoladora es algo que sucederá en el monte del templo en Jerusalén. Algunos piensan que para que esos versículos puedan cumplirse es necesario que se construya un nuevo templo, que será profanado poco después. Ellos dicen que basta con erigir unas pocas piedras en ese lugar. Algunos creen que esos versículos podrían cumplirse si tan solo se colocara un altar en ese lugar para que alguien pudiera ofrecer nuevamente un cerdo sobre ese altar. Todas esas ideas son tan ridículas, tan improbables, que me cuesta creer que alguien pueda siquiera considerarlas.

La profecía del Monte de los Olivos es de hecho la clave para comprender que los primeros cuatro Sellos de Apocalipsis se refieren a la propia Iglesia de Dios y a lo que sucedería después que una abominación desoladora tuviese lugar espiritualmente en la Iglesia, en el verdadero Templo espiritual de Dios. Esos Sellos no anuncian una tribulación física que vendría sobre el mundo, pero una tribulación espiritual que vendría sobre la Iglesia de Dios.

De hecho, Dios revela en Su palabra que una gran destrucción vendría sobre esos dos cristianismos en el tiempo del fin. Como he mencionado antes, cuando Dios ponga fin a la Tercera Guerra Mundial, todas las instituciones del cristianismo tradicional, el cristianismo que fue fundado en el año 325 d.C., serán completamente destruidas.

Dios también revela en Su palabra que Su propia Iglesia sufriría una enorme destrucción. Y, como Cristo predijo en la profecía del Monte de los Olivos, esto tendría lugar en el tiempo del fin, justo antes de que él venga para establecer el Reino de Dios. Si usted comprende que esos Cuatro Jinetes de Apocalipsis se refieren a los acontecimientos anunciados por los cuatro primeros Sellos de Apocalipsis, entonces usted puede entender la secuencia de los acontecimientos que conducen a la Tercera Guerra Mundial y a la segunda venida de Cristo.